El médico emprendedor será siempre la cabeza de su propia empresa de servicios sanitarios, por tanto, sus malos hábitos personales repercuten directamente en ella.

Si te niegas a creer que tu personalidad afecta a tu negocio y viceversa, solamente pregúntate: ¿a quién preferiría un paciente, a un médico cansado y con panza, o a uno que luce saludable? La respuesta es obvia, ¿no? ¡Tú eres lo que vendes!

Por tanto, considera eliminar estos malos hábitos que dañan tu capacidad de emprendedor:

1. Descansar insuficientemente

Como profesional de la salud sabes que el descanso inadecuado afecta al rendimiento, por ello, una de tus metas como médico emprendedor, aunque tengas infinidad de trabajo, es hacerte de tiempo suficiente para tomar un respiro, a fin de que ofrezcas el máximo desempeño en tu consultorio médico.

2. Tener malas finanzas personales

El poco control que tengas sobre tu dinero se traducirá en problemas financieros para tu empresa de servicios sanitarios. Si eres de las personas que suelen endeudarse con tal de darse lujos, es hora de cambiar esta conducta, ya que llegará el momento en que en verdad requerirás de préstamos para ampliar el consultorio, o bien, para superar una crisis, y si tienes un mal historial o ya existen créditos pendientes, te será imposible solventar estas dificultades.

3. Hacer poco ejercicio

Los emprendedores son famosos por sacrificar su bienestar en pro de sus negocios, pero tú no puedes darte este lujo. Recuerda que, como médico, tus pacientes esperan que proyectes la salud que ello desean conseguir y que seas capaz de aplicar sobre ti mismo los conocimientos que posees.

4. Tener malas relaciones personales

Si eres de las personas que prefieren encerrarse en sí mismas antes que entablar nuevas relaciones personales es seguro que enfrentarás problemas para hacer crecer tu empresa de servicios sanitarios, ya que ésta requerirá de relaciones públicas para dar a conocer su marca médica, o bien, para conseguir buenos proveedores de instrumental, medicinas o mobiliario, además, siempre es bueno contar con apoyo de colegas capaces de asesorarte en casos difíciles, sin mencionar que los pacientes prefieren la calidez del médico sobre cualquier otro beneficio del consultorio para decidirse a regresar con él.