¿Crees que si tu vida dependiera de tu autoconocimiento te salvarías? La gran mayoría de personas andamos por la vida muy seguros de saber quiénes somos pero cuando tenemos que responder con detalle a esta pregunta, la tarea se vuelve difícil.
El autoconocimiento está en el corazón de la inteligencia emocional y consiste en la habilidad para reconocer nuestras emociones, pensamientos, valores personales y sus efectos en nuestra forma de vivir. Por tanto, conocernos a nosotros mismos es la clave para tener una vida plena, exitosa y feliz.
Así que si quieres mejorar o desarrollar el autoconocimiento, a continuación te ofrecemos una serie de técnicas que deberías poner en práctica.
Aumentar tu vocabulario emocional para mejorar el autoconocimiento
Esta técnica empieza por reconocer y ponerle nombre a lo que sentimos, por conocer las emociones. Para esta técnica, puedes, durante dos minutos, escribir todas las emociones que conozcas. Normalmente, el ser humano solo suele identificar las seis emociones básicas: sorpresa, ira, tristeza, miedo, felicidad y asco. Aunque debajo de cada una de ellas hay un sinfín de posibilidades. Por eso es muy importante incrementar nuestro vocabulario emocional y utilizarlo activamente.
Reconectar con tu cuerpo
Al experimentar una emoción, una especie de señal eléctrica pasa por nuestro cerebro y se traduce en una sensación física, que puede ser muy variada. Nuestra mente y nuestro cuerpo están conectados que podemos aprender a relacionar sensaciones físicas con emociones. Estar en sintonía con nuestro cuerpo para identificar nuestras emociones es casi como magia. Lo que puedes es hacer pausas para identificar qué sientes y dónde lo sientes.
Llevar un diario de emociones para tu autoconocimiento
El obstáculo más grande para desarrollar el autoconocimiento es la objetividad. En un diario puedes registrar eventos que detonan emociones fuertes y describir tus reacciones. Gracias a esta práctica puedes identificar patrones y distinguir cómo te sientes físicamente ante cada emoción.
Identificar el efecto de tus emociones en los demás
Nuestros despliegues de emociones, para bien o para mal, tienen consecuencias en las personas a nuestro alrededor. Las emociones son contagiosas. Identificar y manejar nuestras emociones es un trabajo de tiempo completo y puede ser verdaderamente agotador. Desarrollar el autoconocimiento nos hace más eficientes en esta labor, es como un atajo que hace el camino más corto, nos permite aprender de nuestros errores más rápido, libera tiempo y energía que podemos dedicar a aventuras más interesantes.
Identificar tus detonadores
Para lograr un excelente autoconocimiento debes identificar perfectamente qué personas, situaciones, conversaciones, lugares o fechas te disparan. Si eres consciente de ello, puedes trazar un plan de acción para mantener la calma la siguiente vez que te tengas que enfrentar a ellas.