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6 de cada 100 hospitalizados por Covid-19 fallecen al ser dados de alta

Las principales secuelas que provoca la Covid-19 son fatiga, disnea, dolor articular, dolor torácico, cansancio y febrícula.

El día de hoy empezó con la noticia de que Moderna es la segunda farmacéutica en concluir todas las fases de desarrollo de la vacuna contra la Covid-19. Se trata de un una nueva alternativa que llegue en el punto más alto de la segunda ola de casos que afecta al planeta. De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), hasta este momento se contabilizan 62.8 millones de casos y 1.46 muertes por esta nueva enfermedad.

Pacientes pueden nunca superar el problema

Por su parte, una rasgo que ha mostrado esta nueva cepa de coronavirus es que puede generar consecuencias a largo plazo. Inclusive se ha bautizado como Covid-19 persistente a la enfermedad cuando se mantiene en el paciente durante un largo período de tiempo. Algunos estudios han detectado que las secuelas se pueden prolongar hasta por cuatro meses después de haber sido dado de alta de un hospital.

Ahora bien, al hablar de los órganos del cuerpo, los que suelen sufrir más daños son el corazón (32 por ciento), pulmones (33 por ciento), riñones (12 por ciento), hígado (10 por ciento), páncreas (17 por ciento) y bazo (6 por ciento).

Por todo lo mencionado, cuando una persona se recupera de la Covid-19 no se puede afirmar por completo que el problema se haya terminado. La evidencia muestra que algunas secuelas como fatiga, disnea, dolor articular, dolor torácico, cansancio y febrícula son frecuentes en los supervivientes y se pueden mantener durante tiempo indeterminado.

Los problemas nunca se terminan

Pero ahora, un estudio publicado en Medscape muestra que la Covid-19 puede mantenerse en el cuerpo inclusive si las pruebas de detección resultan negativas. Mientras que muchos de esos casos pueden llegar a ser mortales.

Como parte de un estudio observacional realizado en 38 hospitales de Estados Unidos se obtuvo que 6.7 por ciento de los supervivientes de la Covid-19 fallecieron en un rango máximo de 60 días posteriores a su egreso del nosocomio. Mientras que el 15.2 por ciento tuvieron que volver a ser ingresados por complicaciones derivadas de la enfermedad.

También se informó que los pacientes que primero fueron internados en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) tuvieron consecuencias más graves a futuro. Para ese grupo la tasa de mortalidad fue del 10.4 por ciento después de haber sido dados de alta.

Por todo lo mencionado se planea continuar con las investigaciones para determinar todas las consecuencias que provoca esta nueva enfermedad. La evidencia muestra que es muy arriesgado afirmar que una vez superada la Covid-19 se terminan los problemas. Existe el riesgo latente tanto a sufrir de secuelas como a presentar complicaciones que pueden ser mortales.

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