• El chatbot ChatGPT funciona mediante el lenguaje por Inteligencia Artificial GPT-3 y en la actualidad es el más poderoso del mundo.
• Su principal virtud es que permite escribir textos elaborados e incluso mantener conversaciones en tiempo real como si fuera una persona.
• Una empresa dedicada a brindar apoyo por escrito a personas con problemas de salud mental puso a prueba esta nueva herramienta.

La tecnología se reinventa todos los días y lo que antes parecía imposible hoy se puede realizar. En especial existe una herramienta que ha sorprendido por alcanzar la cúspide de la Inteligencia Artificial. Se trata de ChatGPT y aunque sus habilidades parecen infinitas en realidad no es perfecta. A través de un experimentó se comprobó que tiene una desventaja en comparación con la atención humana.

Antes de avanzar es necesario explicar algunos conceptos básicos. El término Inteligencia Artificial fue acuñado por el informático John McCarthy en 1956. A grandes rasgos consiste en replicar por medio de computadoras las funciones que antes eran propias de humanos. El objetivo final es hacer que “piensen” de la misma forma en que lo haría una persona.

Dentro del campo de la Medicina se puede apreciar mediante el análisis de grandes cantidades de información. Por ejemplo, para revisar miles de casos clínicos se necesita de semanas enteras si se realiza de forma manual. En cambio, con medios electrónicos se puede hacer en unos segundos. De esta forma se obtiene un valioso ahorro de tiempo.

El chatbot más poderoso del mundo

Con este principio, la compañía OpenAI desarrolló un chatbot tan poderoso que puede mantener conversaciones escritas tan perfectas que simula ser un humano. El programa se llama ChatGPT y funciona mediante el lenguaje por Inteligencia Artificial GPT-3.

Tiene un algoritmo tan potente que incluso puede escribir textos elaborados. A diferencia de otras opciones sus respuestas ya no son monótonas y predecibles sino que realmente escribe como si fuera una persona real.

Pero aunque se menciona con frecuencia que es una herramienta “perfecta” es precisamente esa cualidad su principal falla. Todo parte de un experimento realizado por la empresa Koko que ofrece apoyo a personas con problemas de salud mental como la depresión.

En este caso, el chatbot fue empleado para brindar acompañamiento por escrito a 4,000 personas que manifestaron tener trastornos mentales. Dentro de las ventajas estuvo poder entablar una conversación en tiempo real. La respuesta para cada una fue inmediata y con mensajes lógicos y coherentes.

Las máquinas no logran transmitir empatía como los humanos

El problema, al analizar la experiencia de los usuarios, es que las respuestas eran demasiado “perfectas” para ser de un humano. Por lo mismo, la máxima virtud de ChatGPT no es de utilidad cuando se trata de consolar a una persona que emocionalmente se siente mal.

“La empatía simulada resulta extraña, vacía. Las máquinas no han vivido la experiencia humana, así que cuando dicen ‘eso suena difícil’ o ‘lo entiendo’, suena poco auténtico. Una respuesta de chatbot que se genera en 3 segundos, no importa lo elegante que sea, se siente barata de alguna manera”.

A partir de lo anterior se puede observar que a pesar del desarrollo y el avance tecnológico todavía hay una cualidad humana que las máquinas no pueden replicar. Se trata de la empatía y el poder transmitir calidez a los demás.

De esta forma, si se trata de responder exámenes o pruebas de habilidad la Inteligencia Artificial ofrece buenos resultados. En cambio, para aspectos relacionados con brindar calidez no funciona porque es demasiado “perfecta”.

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