A pesar de la importancia que tiene la salud dentro de cualquier sociedad, en nuestro país parece no ser así. A lo largo de los últimos gobiernos ha existido un descuido preocupante por invertir en un sector que ofrece beneficios para toda la población. Los resultados se pueden apreciar en la mayoría de hospitales públicos del país. Sus instalaciones lucen obsoletas a insuficientes para brindar atención a los pacientes.
En ese sentido, el Dr. Jorge Alcocer, titular de la Secretaría de Salud (SSa), presentó un informe que muestra el estado de la infraestructura hospitalaria de México. En el trabajo se menciona que existen 306 obras inconclusas del sector salud heredadas de la administración anterior. Pero lo que resulta más preocupante es que de ellas, 180 fueron suspendidas por corrupción o falta de dinero.
Sin castigo contra los responsables
Si bien, en muchos de los casos se manifestó el interés de retomar las obras, hasta el momento no se ha señalado a los culpables. La respuesta general del Dr. Alcocer es que los proyecto fueron abandonados en sexenios anteriores pero en ningún momento explicó de forma detallada si habrá castigos o sanciones. En los casos de corrupción se debería de iniciar investigaciones contra las empresas encargadas de las obras, aunque parece que eso no sucederá.
Los estados con más obras suspendidas son: Oaxaca, con 52 que serían hospitales y 6 que funcionarían como unidades de consulta externa; Veracruz con 31 hospitales; Jalisco con 21 hospitales y 10 centros de consulta externa y el Estado de México con 6 unidades de consulta externa.
Por su parte, el Dr. Alejandro Vargas, director general de planeación de la SSa, aclaró el significado correcto del término “obras suspendidas”. Lo que explicó es que no se trata que se hayan perdido por completo sino que todas pueden reanudarse siempre y cuando corrijan los motivos por los cuales fueron detenidas.
