Las principales fuentes de formación sobre sexo entre los jóvenes de 16 a 25 años son Internet y los amigos. Esta es una de las conclusiones de la Encuesta Nacional sobre Salud Sexual y Anticoncepción.

El informe se ha realizado a partir de respuestas facilitadas por 1.200 jóvenes en julio. Se extrae que el 47,8% de los consultados considera Internet como la fuente de información más adecuada sobre temas de salud, mientras que un 45,5% afirmó que su primera fuente de información son los amigos, por delante de los profesores (28%), la madre (23,1%) o el padre (12,4%).

Lo más preocupante es la falta de información y formación

Los chicos eligen, en la primera posición a la web (50,7%) mientras que las mujeres se fían más de sus amigos (46,9%). En ambos sexos, sin embargo, la madre inspira más confianza que el padre a los jóvenes para hablar sobre sexo. Paloma Lobo Abascal, presidenta de la SEC, ha expresado que “lo más preocupante del estudio es la falta de información y formación. No les estamos formando en sexualidad porque muchas AMPAS y colegios se oponen…Por eso, los jóvenes reconocen que no saben lo suficiente y acuden a los sitios más fáciles, como amigos e Internet”.

Aunque el 72% de los jóvenes ha referido haber recibido formación específica y reglada sobre sexo, los expertos han criticado la escasa presencia de cursos y charlas en colegios e institutos. Respecto a esto, Lobo Abascal, ha expresado que “tenemos que educarles en las escuelas en sexualidad y afectividad. Así, se podrían evitar muchas situaciones futuras de machismo, violencia o sexismo”.

Muchos jóvenes acuden a la pornografía como fuente de información para sexo

Asimismo, expertos han reconocido que muchos jóvenes acuden a la pornografía como fuente de información, pero inciden en que eso no es educación sexual. Para ello han expresado que “los chicos, por ejemplo, se sienten obligados a ser una máquina sexual y eso es lo que se ve en las películas porno, nada relacionadas con la empatía”.

El estudio también ha realizado dos grupos de discusión con jóvenes para analizar cualitativamente sus pensamientos, que han revelado que su conocimiento recibido sobre sexo resulta “escaso, con poca continuidad en la información y mal trato”. Además, admiten cierto pudor para tratar este tipo de asuntos en el ámbito familiar, al que solo recurren como última opción y solo en caso de emergencia o situaciones límite.

En canto a métodos anticonceptivos, el preservativo es el más utilizado por los jóvenes (concretamente por el 52%). Le siguen la píldora (22,8%) y la marcha atrás (4,2%). Un 28,4% no utiliza ningún método: un 21% porque no tiene relaciones sexuales, el 1,2% porque no puede tener hijos y el 6,2%no utiliza ningún método a pesar de mantener relaciones sexuales.