Desde el año pasado, la NFL está envuelta en un severo escándalo de salud. En julio de 2017, un estudio publicado en JAMA afirmó que casi todos sus jugadores padecían CTE. La Encefalopatía Traumática Crónica, aseguró el documento, afectaba a 110 de 111 deportistas. Después, en enero, se reportó que la incidencia de la enfermedad aumentó en 13.5 por ciento.
Como parte de su compromiso para luchar contra estas lesiones, la NFL donará 35 millones de dólares (mdd). De acuerdo con AP, el organismo dividirá los fondos entre cinco organizaciones. En todos los casos, se utilizará el dinero para fomentar investigaciones médicas. En específico, los proyectos pretenden mejorar el diagnóstico y tratamiento de varias lesiones cerebrales.
Neurodegeneración, concusiones y otros objetivos de la NFL
La donación se realizará como parte de la iniciativa Play Smart, Play Safe. De acuerdo con el Consejo Asesor Científico (SAB) de la NFL, los recursos serán repartidos a tres universidades, dos facultades de medicina y dos hospitales. Se examinarán, entre otras, condiciones como la CTE, neurodegeneración, concusiones, etcétera. También se harán estudios sobre el estado de salud de jugadores, retirados y en activo. Los fondos serán asignados de la siguiente forma:
Hospital Infantil de Boston y Facultad de Medicina de Harvard: 14.7 mdd. Estudio prospectivo, longitudinal y traslacional de jugadores de la NFL retirados. Dirigido por el Dr. William P. Meehan.
Centro Médico de la/Universidad de Pittsburgh: 6.1 mdd. Prevalencia de salud cerebral frente a neurodegeneración en jugadores profesionales de fútbol retirados.
Universidad de Calgary: 9.4 mdd. Vigilancia en escuelas secundarias para reducir concusiones entre jóvenes.
Universidad de California en San Francisco: 3.5 mdd. Transformando la investigación y el conocimiento clínico en heridas cerebrales traumáticas. Dirigido por el Dr. Geoff Manley.
Hospital de Rehabilitación Spaulding y Facultad de Medicina de Harvard: Espectro de la concusión: Predictores de la recuperación, tratamiento y rehabilitación clínica, y posibles efectos a largo plazo. Dirigido por el Dr. Grant Iverson.
Play Smart, Play Safe compromete a la NFL a invertir 40 mdd a la prevención de estos padecimientos. Los cinco mdd restantes los dedicará a otro proyecto de investigación médica interna. Este estudio será dirigido por del presidente del SAB. Se enfocaría en estrés postraumático, lesiones cerebrales y la prevención del suicidio.
