El acervo de este médico ahora forman parte del patrimonio de la UNAM, ¿sabes quién es?

A este médico se debe que la LGS incluye el derecho universal a la protección de la salud y ahora su acervo es patrimonio de la UNAM.

A través de un comunicado la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) hizo un importante anuncio. Desde el día de hoy el acervo del médico y exrector Guillermo Soberón Acevedo forman parte del patrimonio de la máxima casa de estudios del país. Por lo tanto, muy pronto estarán disponibles tanto para la comunidad universitaria como para el público en general.

Los documentos se integrarán al Archivo Histórico de la Universidad, adscrito al Instituto de Investigaciones sobre la Universidad y la Educación (IISUE), en donde estarán resguardados para su estudio y difusión.

Tras firmar el acta de entrega-recepción de los acervos personales e institucionales de Soberón Acevedo, con el hijo del galeno, Mario Soberón Chávez, el actual rector Enrique Graue Wiechers destacó que esta colección es de gran importancia para entender a nuestra nación. Esto es debido a que la trayectoria del también exsecretario de Salud ayudó al país a forjar el último tercio del siglo XX y principios del siglo XXI.

Aportaciones realizadas al campo de la salud

Bajo la tutela de Soberón Acevedo, remarcó Graue, se logró que la autonomía de las universidades se adicionara al Artículo Tercero constitucional. A él también se debe que a partir de 1983 la Ley General de Salud incluya el derecho universal a la protección de la salud, entre otros aspectos.

“El pasado 25 de febrero el Archivo Histórico de la UNAM recibió, de la familia de nuestro querido y entrañable doctor Guillermo Soberón, su espléndido acervo. Lo recibimos con enorme gusto e interés, porque sé que al maestro Soberón le hubiera gustado este destino para resguardarlo, estudiarlo y difundirlo”.

¿Quién fue el Dr. Guillermo Soberón Acevedo?

Se tituló como médico cirujano en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) en 1949 y se doctoró en química fisiológica en la Universidad de Wisconsin, en los Estados Unidos, en 1956.

La labor científica del galeno fue reconocida con el premio de Ciencias, en 1965; el Premio de Ciencias Elías Sourasky, en 1968; el Premio Luis Elizondo de 1974; el Premio Nacional de Ciencias y Artes de 1980; el Premio Abraham Horwitz de la OPS, en 1991 y el Reconocimiento al Mérito Médico, en 1999.

Ya en el ámbito profesional, fue rector de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) en dos períodos (1973-1981), mientras que estuvo a cargo de la Secretaría de Salud (SSa) de 1982 a 1988. Fue en ese momento cuando creó el primer Laboratorio de Biología Molecular en México.

Mientras que fue forjador de instituciones que son hoy paradigmas en la lucha contra las enfermedades que más estragos y sufrimientos están causando a los mexicanos. Algunas de ellas son el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (CONACyT), el Instituto Nacional de Medicina Genómica (INMEGEN) y el Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias (INER).

En tanto que el 12 de octubre de 2020 falleció aunque dejó un profundo legado dentro del campo de la salud en nuestro país. Su aportación es tan grande que inclusive se ha propuesto que el Instituto Nacional de Salud Pública (INSP) lleve su nombre. Por lo pronto ahora sus acervos ya forman parte del patrimonio de la UNAM.