Dentro del panorama actual, los accidentes provocados por animales ponzoñosos ya son considerados un problema de salud pública en México. Las cifras actuales señalan que, en promedio, cada año se reportan 300 mil intoxicaciones por alacrán y 3 mil 800 por serpiente.
Ante estos hechos, es muy importante al actuar de los laboratorios farmacéuticos para ofrecer alternativas a los hospitales. Así lo considera el Dr. Luis Eduardo Robles Ortiz, Director Médico de INOSAN Biopharma, empresa especializada en la investigación y desarrollo de antivenenos surgida en el 2012, aunque con presencia en nuestro país a partir del 2015.
Pese a la gravedad del problema, se trata de un tema de salud que se encuentra descuidado en México. Apenas somos tres laboratorios los que nos enfocamos en la producción de antídotos para picaduras por animales ponzoñosos. Por este motivo el personal de salud a veces busca tratamientos alternos para disminuir la sintomatología en los pacientes, lo que tiene como consecuencia un aumento en las complicaciones y un incremento en el costo del tratamiento.
Largo y complicado proceso
A su vez, el especialista que no sólo es complicado el desarrollo de un antiveneno sino que se deben seguir ciertos procesos legales son tardados en México. Gracias a la tecnología con la que cuenta INOSAN es que se pueden elaborar antivenenos con una seguridad mayor al 99 por ciento. Lo anterior es debido a su pureza y porque se diseñan específicamente para ciertos animales ponzoñosos.
Durante los 4 años que llevamos en México nos hemos dedicado a cumplir las diferentes regulaciones sanitarias que marcan la Ley General de Salud, las Normas Oficiales y Farmacopea. También se requiere de una licencia sanitaria, tramitar un certificado de buenas prácticas de producción y posteriormente inicia el trámite de registro de cada uno de los productos.
Por lo pronto, el Dr. Robles Ortiz confirma que en próximas fechas el laboratorio tendrá disponibles en el mercado mexicano los antivenenos de alacrán y viperino. Con esto se busca reforzar las opciones con las que cuentan los hospitales para este tipo de picaduras.