El quehacer del redactor médico es hasta el momento un tanto desconocida, incluso entre los mismos profesionales de la salud. Pero lo cierto es que esta disciplina puede convertirse en una gran oportunidad de negocio para quien desee o para quien ya se encuentre inmerso en la redacción de textos y materiales relacionados con las ciencias de la salud, principalmente en áreas de la farmacéutica o en el mundo editorial especializado.
¿Cuáles son las funciones principales del redactor médico?
Quien se especializa en la redacción médica, suele trabajar en la descripción de resultados obtenidos en investigaciones médicas en las que generalmente no ha colaborado. Para alcanzar un estándar de calidad, debe trabajar de la mano con médicos, farmacológos, científicos y otros profesionales de la salud responsables de dichas investigaciones. Por lo tanto, es responsabilidad del redactor médico transmitir ese mensaje de una manera efectiva y clara.
Otra de las principales actividades del redactor médico es vigilar que los documentos que se encuentran en su poder, cumplan con todas las normas establecidas por las instituciones reguladoras, o en el caso del mundo editorial, que se apeguen a los requisitos de las revistas o de los libros a los que van dirigidos.
¿Qué servicios puede ofrecer un redactor médico?
Si te has planteado la posibilidad de dedicarte a la redacción de textos médicos, esta profesión ofrece una gran posibilidad de servicios que puedes ofrecer:
- Redacción de textos científicos para libros y revistas especializadas tanto nacionales como internacionales.
- Organización de documentos regulatorio para estudios clínicos.
- Creación de contenido científico para sitios online, o bien, para folletos informativos.
- Redacción y revisión de materiales de apoyo para exposiciones orales.
- Revisión de cualquier material médico o científico.
Para realizar un buen trabajo de redacción de textos médicos y científicos, no olvides trabajar con exactitud, rigor, neutralidad y neutralidad. Y no menos importante, un buen redactor médicos siempre debe hacer uso de fuentes de información confiables y que tengan un sustento científico.