Podemos ver, que las consecuencias de los desastres naturales, las emergencias sanitarias, el desplazamiento forzado, el narcotráfico y las guerras, no solo dejan muerte y desolación. Ya que, el impacto psicológico, es tan contundente que marca un panorama poco alentador para las personas que viven esas experiencias. Sobre todo, porque el estrés postraumático, deja secuelas que puede llegar a limitar al individuo.
Es así, como hallamos, que tanto los militantes de grupos armados, pandillas y fuerza pública, tienen una carga emocional mayor. Ya que, se encuentran constantemente en zona de guerra, enfrentados a linchamiento, ejecuciones, bombardeos, armas y racionamiento de víveres. Por tanto, estos actores de la sociedad, al igual que los habitantes de zona en conflicto, tengan un riesgo muy alto de desarrollar enfermedades mentales que otra persona alejada de estos escenarios.
De hecho, notamos, que los involucrados en emergencias humanitarias y guerra, aunado con las catástrofes provocadas por la naturaleza, requieren un acompañamiento psicológico, que les permita hacer duelo, superar el trauma y ser resiliente. De tal forma, que, de manera individual y colectiva, se pueda establecer mecanismos que faciliten el desarrollo social, el progreso, la comunicación y el fortalecimiento de las instituciones en pro de la comunidad.1
Impacto psicológico y enfermedades postraumáticas
El trastorno de estrés postraumático, es la principal consecuencia de los conflictos sociales. Llevando a mostrar síntomas como cambios bruscos en el estado de ánimo, aislamiento, evasión y reacciones físicas y emocionales. De ahí, que los recuerdos generen angustia, pesadillas, pensamientos suicidas y desesperanza.1
Igualmente, también encontramos la esquizofrenia y diversos trastornos; de personalidad, obsesivo compulsivo y psicótico; cuya patogénesis puede ir adherida al impacto psicológico, que genera un hecho traumático o una situación de conflicto social. Con repercusiones que pueden ir desde alteraciones en el comportamiento o dificultades de coordinación de pensamiento, hasta escape de la realidad y demencia.2
Asimismo, se visibiliza la falta de interés, los sentimientos perturbadores y el estrés crónico, llevando a desarrollar trastornos de sueño, dificultades de aprendizaje y alteraciones en el comportamiento social. Además, estar en modo de huida todo el tiempo, genera en el organismo un mayor bombeo de sangre que puede llegar a afectar el corazón y los demás sistemas. Lo que hace, que se de paso a enfermedades altamente incapacitantes.3
Es ahí, donde aparece con frecuencia la hipertensión, las cardiopatías, la obesidad, la diabetes y los accidentes cerebrovasculares. Sobre todo, porque las alteraciones neuroquímicas producidas por eventos traumáticos, repercuten de manera particular en cada individuo. Obligando a que se considere establecer un cuadro clínico y métodos de tratamiento personalizados. 3
Mucho por hacer
Concluimos, que el impacto psicológico de los conflictos sociales puede afectar la parte mental y orgánica del individuo, deteriorando su desarrollo personal y sus capacidades. Por lo tanto, la ayuda profesional se vuelve una herramienta de gran valor para paliar la sintomatología y ofrecerle alternativas para tener calidad de vida.
De esta forma, se presentan los medicamentos antidepresivos, en conjunto con psicoterapia, métodos de afrontamiento y terapias alternativas, como parte del tratamiento. Donde, la programación neurolingüística, los programas de física cuántica, el tapping, la respiración consciente, la meditación y el yoga, pueden ser de gran utilidad. Especialmente cuando están coordinados por profesionales idóneos que buscan mejorar la salud del individuo.
Referencias:
1.Trucco Marcelo. Estrés y trastornos mentales: aspectos neurobiológicos y psicosociales. Rev. chil. neuro-psiquiatr. [Internet]. 2002 Nov [citado 2021 Jul 26]; 40(Suppl 2): 8-19. Disponible en:
http://www.scielo.cl/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0717-92272002000600002&lng=es.
2.Peña Galbán Liuba Yamila, Espíndola Artola Arnaldo, Cardoso Hernández Jorge, González Hidalgo Tomás. La guerra como desastre. Sus consecuencias psicológicas. Rev. Hum Med [Internet]. 2007 dic [citado 2021 Jul 26]; 7(3). Disponible en:
http://scielo.sld.cu/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1727-81202007000300005&lng=es.
- Ignacio Martin- Baró. Guerra y salud mental. Papeles del Psicólogo. [internet] 1993 [ consultado 26 julio 2021]; 56. Disponible en:
http://www.papelesdelpsicologo.es/resumen?pii=585.
