No es ningún secreto el actual problema que la diabetes representa en nuestro país, motivo por el cual en noviembre de 2016 la Secretaría de Salud (SSa) emitió una alerta epidemiológica nacional con el objetivo de alertar sobre los daños causados por este padecimiento a la población mexicana, aunque lo más lamentable es que la situación parece no mostrar signos de mejoría.
Para poder dimensionar el tamaño del problema, mientras que en 1980 se registraron 14 mil muertes provocadas por diabetes, para el 2016 la cifra fue de 98 mil fallecimientos, lo que representa un crecimiento de más del 400 por ciento.
Con estos antecedentes en mente, no son de sorprender los resultados dados a conocer por la Organización Mundial de la Salud (OMS), según los cuales México registra la mayor tasa de mortalidad por diabetes en todo el planeta, ante lo cual es urgente el implementar nuevas estrategias que ayuden a combatir el problema porque hasta el momento no se ha observado ningún avance.
Al respecto, la OMS mostró preocupación porque mientras que anteriormente la diabetes sólo se presentaba en personas de la tercera edad, ahora cada vez se diagnostica en ciudadanos más jóvenes, además de que el aumento en el índice de obesidad en México también tiene un fuerte impacto porque se trata de su principal factor de riesgo.
Por otra parte, de acuerdo con la OMS, en caso de continuar con la misma tendencia, dentro de los próximos años la diabetes podría convertirse en la primera causa de muerte en México, superando inclusive a las enfermedades cardiovasculares que actualmente son las responsables del 54 por ciento de los fallecimientos.