Las estadísticas de cáncer en la actualidad son aterradoras. Cada año provoca la muerte de más de 8 millones de personas en todo el mundo y la tendencia se muestra a la alza. A su vez, se detectan alrededor de 14 millones de nuevos casos en el mismo período de tiempo. Con todo esto, ya se considerada una de las primeras causas de mortalidad en el planeta.
Si bien, una gran cantidad de tumores son provocados por hábitos dañinos como el tabaquismo, alcoholismo y la falta de ejercicio constante, no en todos es así. En nuestro país, el Colegio Mexicano para la Investigación del Cáncer (CMIC) afirma que el 10 por ciento de los casos son de tipo hereditario. Esto se traduce en alrededor de 20 mil al año.
El Dr. Luis Alonso Herrera, director general del Instituto Nacional de Medicina Genómica, destaca que este tipo de cáncer es más común en órganos como la mama, los ovarios, el endometrio, el colon y el tubo digestivo.
Aspectos a considerar
En tus pacientes, revisa si cumplen alguna de las siguientes dos condiciones porque son indicativos de que podrían padecer de cáncer hereditario.
- Tener muchos parientes con cáncer en el mismo lado de la familia, especialmente si hay casos diagnosticados a edades jóvenes.
- Tener una persona en la familia con múltiples tumores, especialmente en el mismo órgano.
¿Qué son las pruebas genéticas para el cáncer hereditario?
Las pruebas genéticas identifican a los pacientes con mutaciones importantes para la salud. Mediante el análisis de los genes, cromosomas o proteínas de una persona se puede:
- Ayudar a predecir el riesgo de que alguien padezca cáncer.
- Identificar portadores de la enfermedad. Son las personas que no tienen la enfermedad, pero tienen una copia del gen mutado.
- Diagnosticar la enfermedad.
- Ayudar a diseñar un tratamiento más efectivo para el paciente.
La importancia del historial familiar
La información del historial familiar puede ayudarte a determinar si:
- Tu paciente y otros integrantes de su familia necesitan asesoría genética.
- Tu paciente requiere más pruebas genéticas.
- Tu paciente requiere un seguimiento más intensivo que otras personas con cáncer no hereditario.
Es importante tener en cuenta que para algunos familiares puede ser incómodo o difícil hablar sobre su salud, por lo que tendrás que ser paciente y comprensivo. Como médico recuerda no sólo cuidar a tus pacientes sino a todo su entorno.
