Senadores solicitaron al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) y al Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) aplicar medidas para vigilar la correcta implementación de programas de equivalencia o sustitución terapéutica.
La legisladora Andrea García García recordó que estos esquemas generan ahorros al gasto público, pero la sustitución de medicinas o tratamientos ha causado efectos secundarios, por lo que pidió a los institutos que cumplan con la regulación establecida, la cual requiere el consentimiento informado de los pacientes:
Tenemos que generar reglas claras para garantizar la seguridad del paciente. La ejecución de los programas de equivalencia deben efectuarse pensando en la salud, pues es el primer paso para un ahorro real y eficaz en las instituciones sanitarias (…) Un paciente con tratamiento inadecuado para la diabetes puede tener como consecuencia intervenciones costosas para su salud y el presupuesto de salud pública.
Por su parte, el senador Francisco Salvador López Brito, presidente de la Comisión de Salud, reconoció que el sector público mexicano enfrenta grandes retos para disminuir los gastos y alcanzar sus objetivos en materia de salud:
Debemos estar abiertos a incorporar nuevos esquemas de tecnología y prácticas médicas con base en la nueva situación política, social, demográfica y económica del país, nunca poniendo en riesgo la salud de los mexicanos ni escatimando recursos.
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