Una de las principales causas por las que los pacientes no asisten a tu consultorio, incluso cuando ya tienen una cita agendada, es porque tus honorarios les parecen caros. Incluso puede ocurrir que al final, cuando mencionas el precio de la consulta, tu paciente se sobresalte cuando escuche lo que debe pagar.
Estas situaciones posiblemente te han hecho pensar en si tus honorarios son caros y si deberías bajarlos un poco para que tus pacientes no se “espanten” con el precio.
A continuación te presentamos algunos tips para que tus pacientes valoren tus servicios y los convenzas de que eres el mejor médico que podrán encontrar.
Argumenta
Aprende a argumentar que tus servicios van más allá del precio. Si tu paciente necesita un tratamiento para controlar la diabetes, convéncelo mediante las ventajas que el tratamiento le dará: se sentirá mejor, volverá a realizar sus actividades con normalidad, ya no se sentirá cansado, etc.
Gánate su confianza
Por alguna razón, a veces la gente evita pagar mucho en cuestiones de salud. Por lo tanto tendrás que echar mano de algunos recursos verbales para convencer al paciente de las ventajas que ofrece el tratamiento y de lo mejor que se sentirá una vez que lo termine.
Tus servicios tienen un valor
Es posible que abrir tu propio consultorio te haya tomado años de esfuerzo y sabes que mantenerlo no es fácil. Hazle saber a tu paciente que tu clínica le ofrecerá una experiencia profesional y agradable que no encontrará en otro lugar. Si trabajas en una clínica o en un hospital, menciónale al paciente que tu equipo de especialistas médicos son profesionales sumamente capacitados dispuestos a ayudar a la gente. Y si además cuentas con otros servicios agregados, como información en redes sociales citas online o equipo médico de vanguardia, el valor de tus servicios quedará más que demostrado.
Demuestra educación
Aunque no lo parezca, una de las cosas que un paciente busca en un consultorio médico es que lo traten con respeto, pero sobre todo, que lo hagan sentir importante, por lo que deberás trabajar todos los días para fortalecer la confianza con tus pacientes.
La próxima vez que un paciente diga que tus precios son muy caros, piensa que tu servicio en realidad lo vale y demuéstraselo.