Laboratoristas del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) de cuatro estados reportaron que existe un gran rezago tecnológico en el equipamiento de los laboratorios subrogados, además de denunciar que el equipo con el que laboran contidianamente tiene más de 10 años de antigüedad.
Por si fuera poco, los empleados también dieron a conocer que existe escasez de reactivos y se mostraron molestos por el rezago en la entrega de resultados de las muestras y diagnósticos.
Un ejemplo de esto fueron los reportes que realizaron empleados de las Unidades Médicas Familiares 2 y 17, localizadas en Santa María la Ribera y Miguel Hidalgo de la Ciudad de México, quienes señalaron que las áreas de laboratorios cuentan con un enorme atraso tecnológico, situación que ha provocado que deban entregar los resultados clínicos hasta días después.
“Antes usábamos un equipo Dimension, ahora usamos un Biosistems BA400, el cual utilizábamos hace años años y además está en muy malas condiciones. Un aparato de estos, por ejemplo, no tiene puerta”.
Otro caso similar ocurre en la Unidad Médica Familiar Número 8, en donde fue reemplazado un equipo que entregaba los resultados de las pruebas en dos horas, por uno que tarda entre cinco y seis horas.
“Este retroceso ha ocasionado que tardemos más tiempo en ofrecerle un buen servicio a los derechohabientes y por lo tanto los médicos no pueden dar sus diagnósticos oportunamente. Además este problema también está afectando la calidad de las muestras”, declaró una laboratorista.
Los empleados del IMSS que se encuentran molestos por esta situación, mencionaron que en Tamaulipas hay desabasto de reactivos y que aún no se ha instalado el nuevo equipo de laboratorio. Asimismo declararon que en Oaxaca hay personal externo privado trabajando en algunas clínicas del seguro social.