El futuro presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, llegará a la Casa Blanca con 70 años cumplidos. Ante este hecho, algunos especialistas han empezado a cuestionar cómo será la salud del nuevo dirigente de la nación más poderosa del mundo.
¿Qué tal se vive a los 70 años?
En 2015, John Beard, jefe del Departamento de Envejecimiento y Ciclo de Vida de la Organización Mundial de la Salud (OMS), señaló que, “al contrario de lo que se piensa sobre el envejecimiento, existe poca evidencia de que una vida longeva significa vivir mucho mejor actualmente que las generaciones pasadas a la misma edad. Las personas con menos recursos, las que tienen pocas opciones de acceso a la salud, son las que posiblemente tendrán mayores problemas por su estado de precariedad”.
El experto mencionó que si bien existen enfermedades que no necesariamente se relacionan con una edad más avanzada, una vida poco saludable sí puede empezar a pasar factura a esa edad.
¿Estados Unidos tendrá un presidente saludable?
Beard destacó que hacer actividad física y alimentarse sanamente pueden hacer que la vida a los 70 sea más llevadera, pero… ¿llevará Donald Trump a la práctica estos consejos?
Este año, la OMS dio a conocer que para 2050 habrá 2 mil millones de personas mayores de 60 años. Incluso, algunos estudios mencionan que si una persona desea llegar a los 90 años, todo dependerá de cómo se haya cuidado a partir de los 70, considerando además una serie de factores: no fumar, no tener diabetes, tener un peso saludable y hacer actividad física regular.
Cabe destacar que hace unos meses Donald Trump decidió entregar al periódico The Washington Post una carta en la que detalló su último examen físico y discutió su estado de salud, con vistas a las elecciones presidenciales, en televisión abierta en el programa “The Dr. Oz Show”. Además, Harold N. Bornstein, médico de cabecera del futuro presidente de los Estados Unidos, ofreció más datos al respecto al decir que Trump toma rouvastatina para bajar los niveles de colesterol.
De acuerdo a dicho reporte médico, Trump mide 1.90 de altura y pesa más de 107 k. Además su nivel de colesterol estaba en aquel momento en 169; su presión sanguínea fue de 116 sobre 70 y su nivel de azúcar en sangre era de 99 miligramos por decilitros.
“Su salud cardiaca está en perfectas condiciones. Mi paciente es el individuo más sano para ser elegido como presidente”, aseguró Bornstein, quien se encuentra a cargo de la salud de Donald Trump desde 1980.
