¿Sabes cuál es uno de los factores más importantes para cautivar y retener a un paciente? Dotar de personalidad a tu consultorio médico puede ser un recurso infalible.

¿Cómo impactar a tus pacientes?

Antes de remodelar tu consultorio, es conveniente que pienses en el impacto que deseas causar en tus pacientes. No olvides que tu espacio de trabajo siempre debe reflejar profesionalismo y al mismo tiempo comodidad, dos aspectos que muchos consumidores de servicios de salud buscan actualmente.

Hacer todo lo necesario para que el paciente se sienta cómodo y tranquilo debería ser una de las principales prioridades de todo consultorio. En este sentido, te presentamos cuatro claves que debes considerar antes de remodelar tu consultorio.

• ¿Distribuye el espacio? Si piensas que el espacio de tu consultorio no es lo suficientemente grande para realizar tus actividades durante la consulta, entonces piensa en la distribución y tamaño de tus muebles, ya que éstos deben acoplarse al espacio del que dispongas. También se recomienda decorar las paredes con cuadros u otros objetos relacionados con tu especialidad para que proyectes mayor profundidad y amplitud de espacio.
• ¿Haz tu sala de espera más cómoda? Elige sillas acolchadas con o sin brazos y sillones duraderos, de estilo tradicional a fin de ofrecer confort sin pasar de moda. Usa alfombras de larga duración, lámparas y tablones a modo de revisteros. Coloca el escritorio de la recepción en la vista inmediata de la puerta para que sea el punto focal de la habitación. Mezcla las sillas y sillones en grupos pequeños alrededor de la habitación, pero procura que el escritorio quede a la vista de todos.
• Usa colores idóneos. Al decorar o remodelar tu consultorio piensa en la gama con la que tus pacientes se sentirán más  tranquilos. Checa este artículo para mayor información.
• Piensa en los acabados. Los acabados le darán personalidad a consultorio y dependiendo de su calidad, serán un factor importante para que tus pacientes se sientan cómodos en tus instalaciones. Cuida que los pisos sean brillantes y fáciles de limpiar. Puedes elegir pisos de cerámica o de porcelanato. En cuanto a las paredes, píntalas de colores relajantes dentro de la gama de verdes y azules claros. Puedes usar blanco para complementar a los demás colores.