El médico es percibido por la mayoría de la gente como una figura de respeto, lo que hace suponer que en la séptima década de vida será considerado una referencia de mayor autoridad  y admiración, no obstante, en el caso de un galeno de Filadelfia, Estados Unidos, esto está muy lejos de ser realidad.

A los 78 años de edad, Alan Summers confesó ante una corte federal del vecino país del norte crímenes variados, los cuales incluyen fraude contra el sistema de salud, distribución de drogas, lavado de dinero y asociación delictuosa.

Según lo revelado por la fiscalía, Summers y otros dos médicos vendieron recetas para obtener drogas controlados por valor cercano a los 5 millones de dólares a traficantes y adictos.

A la hoy clausurada clínica de la Asociación Nacional para el Tratamiento y Prevención de Abuso de Drogas donde llevaba a cabo esta clase de actividades, acudían aproximadamente un millar de pacientes cada mes.

Por ahora, el Dr. Summers se ha declarado culpable, la igual que el médico Keyhosrow Parsia, quien lo hizo el mes pasado, no obstante, el tercer acusado espera juicio.

Esta noticia se presenta luego de que se diera a conocer que las autoridades federales de Estados Unidos han redoblado esfuerzos, por ejemplo, en los centros médicos del Departamento de Asuntos de Veteranos debido a la “desaparición” de medicamentos opiáceos, fenómeno que ha tenido considerable aumento desde 2009 según lo revela por The Associated Press.

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