Científicos e investigadores de la Asociación Americana del Corazón (AHA) desarrollaron un estudio a través del cual se enfocaron en desmitificar el discurso alrededor de los beneficios del aceite de coco en la salud de los pacientes. Con esto en mente, los expertos descubrieron que los productos derivados de este insumo son perjudiciales para la población, toda vez que aumentan el riesgo de desarrollar enfermedades cardiovasculares.

En este orden de ideas, los especialistas de la AHA explicaron que una de las principales razones por las que el aceite de coco y sus derivados tiene un efectos nocivo para la salud se debe a las altas concentraciones de grasas saturadas, uno de los motivos más destacados en el origen de enfermedades cardiovasculares en venas y arterias del organismo humano.

Coco,
Catalizador del ACV

De tal manera, los especialistas hicieron especial énfasis en que al menos el 72 por ciento de los habitantes en Estados Unidos cree que el consumo frecuente del aceite de coco trae consigo una serie de beneficios para la salud. Situación que carece de fundamentación científica comprobable.

Siguiendo esta línea argumentativa, las autoridades de la AHA recomendaron difundir a través de los profesionales de la salud y los medios masivos de comunicación que el 82 por ciento de la grasa contenida en este tipo de aceite (de coco) está saturada. Un dato que sobre pasa las condiciones que se pueden encontrar en el aceite de oliva, cuyo contenido de grasa saturada es de, apenas, 14 por ciento*.

Al respecto, el médico especialista Franck Sacks, uno de los pricnipales responsables del estudio y miembro de la AHA, explicó que el trabajo de investigación se sustenta en otros varios que han demostrado los efectos negativos de este producto en la salud humana.

El aceite de coco aumentó, en realidad, el índice de colesterol LDL, que es una de las causas de la enfermedad cardiovascular. Puedes ponerlo sobre tu cuerpo, pero no dentro de él.

* Asimismo, el aceite de canola posee un 7 por ciento de grasas saturadas en su contenido energético.

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