En la vida de todo profesional de la salud siempre existirán ciertas decisiones que deben tomarse con cuidado. Algunas de ellas pueden resultar benéficas, pero otras más podrían ser perjudiciales si no se planean con cuidado.

Estas decisiones extraprofesionales son las que podrían perjudicarte principalmente a nivel personal, pues son las que podrían hacer que cruces la línea entre tu trabajo y lo que realmente importa de tu vida. Éstas son las más importantes:

Tomar decisiones basadas en el dinero

Nunca es bueno que tomes una decisión de negocios sólo porque en apariencia, tendrás más ingresos económicos. Invertir está muy bien, pero no te dejes llevar por la emoción; planéalo muy bien, con bastante tiempo de anticipación.

Creer que puedes resolver cada uno de los problemas de tu trabajo

Esta situación podría volverse peligrosa cuando piensas que a tu empresa de salud le iría mejor si fueras capaz de resolver personalmente cada uno de los problemas que ocurren en ella. Si en tu consultorio o clínica tienes personas a cargo, una de tus funciones es supervisar el trabajo de los demás, pero recuerda que para eso tienes bajo tu disposición a jefes de departamento que bien podrían ser capaces de pensar en una solución y reportártela posteriormente para que estés al tanto y tomes la decisión más adecuada.

Trabajar muchas horas a la semana

Tal vez piensas que por ser el jefe debes trabajar hasta desfallecer, porque supones que eso es lo que los demás esperan de ti. Elimina esa idea de tu mente, ya que después de cierto tiempo, tu salud física y mental se lamentarán de haber tomado esa decisión.

Pensar sólo en ti

Posiblemente no lo sabías, pero una buena estrategia para aprovechar oportunidades personales es ayudando a otras personas a superarse. Si vas por la vida pensando sólo en ti y anteponiendo tus necesidades, verás que dentro de muy poco te encontrarás solo.