El director general del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado de Sonora (ISSSTE), Enrique Claussen Iberri, informó que la institución se encuentra al filo de la quiebra debido a los millonarios desfalcos perpetrados por la administración encabezada por el anterior gobernador, el panista Guillermo Padrés.

Aunque el funcionario destacó que ya se ha puesto en marcha un plan emergente para la recuperación de adeudos históricos de ayuntamientos y organismos afiliados, pidió apoyo a los integrantes de las comisiones unidas de hacienda del Congreso local para que aprueben para el ejercicio de 2017 un subsidio extraordinario emergente por mil 787 millones de pesos (mdp), el cual se distribuiría de la siguiente manera:

• 527.9 mdp para pago de nóminas y jubilaciones de los trabajadores afiliados.
• 659 mdp para financiamiento de servicios y medicamentos para los derechohabientes.
• 600 mdp para pago de adeudos de ejercicios fiscales anteriores.

Asimismo, habló de la necesidad de conformar un grupo técnico encargado de evaluar la viabilidad financiera para mantener los actuales porcentajes de cuotas y aportaciones.

Agregó que el Isssteson considerará aplicar medidas administrativas y legales contra los adeudos históricos de gobiernos locales y organismos afiliados puesto que no cuentan con recursos.

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