La indigestión, los gases, la pesadez y la distensión, son algunos de los males que debemos enfrentar cuando abusamos de la comida. Sin embargo, el dolor abdominal, puede ser una señal de una enfermedad mayor, que si no se atiende puede generar complicaciones serias de salud. Por lo tanto, es bueno reconocer algunos malestares que aparecen en esta parte del cuerpo, de tal manera, que busquemos orientación médica en forma oportuna.
Ya que, aunque generalmente síntomas como la inflamación y el dolor pasajero, desaparecen en poco tiempo y no requieren ningún tipo de tratamiento. Cuando el dolor es persistente; y va acompañado de estados febriles, malestar general, debilidad, ictericia, náuseas, vomito y heces con sangre; se deben atender las señales y buscar la ayuda de un profesional de la salud, prontamente.1
El dolor abdominal puede ser indeterminado
Tanto así, que una dolencia localizada entre el tórax y la pelvis, puede representar diversas posibilidades. Por lo tanto, es bueno observar los síntomas y el lugar exacto donde se irradia el dolor. Para, de esta manera, ayudar a establecer un cuadro clínico ajustado y poder paliar en forma eficaz los síntomas asociativos.
Es así, como en la parte alta del abdomen, encontramos muchos órganos vitales, como el estómago, bazo, páncreas, vesícula, riñones e hígado. También, hallamos las glándulas suprarrenales y parte del colon y el duodeno. De ahí, que la inflamación, los cálculos, la ulcera, el reflujo y la gastritis, puedan estar entrometidas en cualquier tipo de molestia. Igualmente, cuando los síntomas son severos se puede pensar en problemas de la vesícula o agrandamiento del bazo.2
De manera similar, podemos explorar la parte inferior del abdomen, donde se encuentra gran parte del colon y el intestino delgado, al igual que el apéndice. Es así, como las principales molestias se presentan por indigestión, gases e inflamación. De esta forma, aparece en el lado derecho la apendicitis y el síndrome del intestino irritable. Mientras que la porción izquierda puede presentarse la diverticulitis.2
Según el genero
En realidad, las características sexuales hacen diferente la zona abdominal de hombres y mujeres, básicamente porque allí se encuentra el aparato reproductivo. De ahí, que el dolor abdominal tenga diferencias marcadas entre géneros. Tanto así, que las mujeres pueden sufrir de cólicos menstruales, dolores referenciados al coito, endometriosis y fibrosis. Pero, también se ven aquejadas de quistes en los ovarios, miomas uterinos e inflamación pélvica.
En el caso de los hombres, el dolor abdominal puede relacionarse con anomalías estructurales, inflamación, infecciones o neoplasias. De esta forma, aparece la hernia inguinal, la torsión testicular y la diverticulitis. Además, los problemas de la próstata pueden presentar complicaciones en la zona pélvica. Así mismo, la afección del colon irritable es muy frecuentes entre los varones que presentan sobrepeso.
Como vemos, el dolor abdominal tiene múltiples causas y sus síntomas pueden ir de leves a severos. Por lo tanto, cuando las señales son recurrentes o constantes se hace necesario consultar. Ya que, específicamente, esta parte del cuerpo recoge la mayor parte de órganos de nuestro cuerpo. Es así, como es necesario darle importancia a cualquier anomalía, que ponga en riesgo el bienestar.
Referencias:
- Marcelo Rodríguez Murillo. Enfoque agudo del dolor abdominal. Rev. Med cost. Ric y Cen. Amer. [internet] 2013 [consultado 25 jun 2021]; 70 (608): 731 – 741. Disponible:
https://www.medigraphic.com/pdfs/revmedcoscen/rmc-2013/rmc134zd.pdf.
- Archila Paulo Emilio. Dolor abdominal crónico: Esencia de la práctica gastroenterológica. Rev. Col Gastroenterol [Internet]. 2007 Dec [cited 2021 June 25]; 22(4): 258-259. Available from:
http://www.scielo.org.co/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0120-99572007000400003&lng=en.
