No son pocas las personas que consideran que el ENARM es un examen que está sobrevalorado. Aunque la prueba forma parte de un complejo proceso para ingresar a la residencia el problema se encuentra en su formato y la falta de transparencia. Además a lo largo de la historia ha enfrentado varios escándalos que incluso han puesto en duda su credibilidad.
¿Qué sigue después de concluir el servicio social?
La carrera de Medicina se distingue del resto por su extensión. Además, al concluir el servicio social no necesariamente es el final del camino porque hay diversas opciones mediante las cuales es posible extender la preparación académica.
Dentro de los beneficios de continuar con la formación profesional se encuentra el conocimiento pero además es una manera para estar mejor preparado y poder acceder a mejores puestos de trabajo.
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¿Cuándo se aplicó el ENARM por primera ocasión?
Antes que nada es importante mencionar que el ENARM se aplicó por primera ocasión en 1977 y desde entonces es obligatorio para poder ingresar a la residencia. Debido a la limitada infraestructura hospitalaria que persiste en el país es necesario que exista un filtro para continuar con la preparación académica porque hay muchos interesados pero pocos espacios disponibles.
¿El ENARM es un examen que está sobrevalorado?
A partir de todo lo anterior ahora es momento de hablar acerca del ENARM y algunos motivos por los cuales se considera que el examen está sobrevalorado.
- No evalúa habilidades clínicas prácticas ni humanísticas: El ENARM es un examen de opción múltiple que se enfoca en conocimientos teóricos. No mide habilidades cruciales para un médico como el razonamiento clínico, la toma de decisiones bajo presión, la empatía, la comunicación con pacientes y familiares, el trabajo en equipo o la capacidad de realizar procedimientos.
- Memorización vs. Pensamiento crítico: Algunas veces se afirma que el ENARM es un examen sobrevalorado porque está redactado en preguntas de opción múltiple, lo que fomenta la memorización de datos y algoritmos en lugar del pensamiento crítico y la resolución de problemas complejos.
- Bajo porcentaje de aceptación y embudo profesional: A pesar de los esfuerzos por aumentar las plazas, la cantidad de aspirantes es significativamente mayor que la oferta de residencias.
- Presión extrema y agotamiento de los aspirantes: La alta competitividad genera un nivel de estrés y ansiedad enormes en los aspirantes. Muchos dedican años a prepararse, invirtiendo en cursos costosos y descuidando otros aspectos de su vida personal y profesional, lo que puede llevar al agotamiento y la frustración.
- Corrupción y filtraciones: Aunque las autoridades se esfuerzan por garantizar su transparencia, el ENARM ha enfrentado acusaciones de corrupción y filtración de preguntas en ediciones pasadas. Estos incidentes minan la credibilidad del examen y generan desconfianza entre los aspirantes.
- No considera el desempeño académico previo ni la trayectoria profesional: El resultado del ENARM es casi el único factor determinante para la asignación de plazas. No se pondera de manera significativa el promedio de la carrera de medicina, el internado, el servicio social, publicaciones científicas, o actividades extracurriculares que demuestran el interés y la vocación del aspirante.
- No refleja las necesidades epidemiológicas del país: Otro de los motivos por los cuales el ENARM es un examen sobrevalorado es porque la selección de especialidades y el número de plazas no siempre se alinean perfectamente con las necesidades de salud pública de México. Por ejemplo, puede haber un déficit de especialistas en zonas rurales o en ciertas especialidades, pero el examen no está diseñado para dirigir a los médicos hacia esas áreas de manera eficiente.
- Forma “profesionales del ENARM”: Existe la crítica de que el sistema incentiva la formación de “expertos en presentar el ENARM” en lugar de médicos con una vocación sólida y habilidades clínicas sobresalientes. Los cursos de preparación, a menudo muy lucrativos, se centran en enseñar cómo pasar el examen, no necesariamente en cómo ser un mejor médico.