La ciencia y la tecnología no dejan de sorprendernos pues ahora, Clemens Bimek, un carpintero alemán, inventó un implante capaz de bloquear el flujo de los espermatozoides con ayuda de una válvula.
Bimek mencionó que esta válvula puede ser la solución para el control de la fertilidad masculina. De acuerdo a Daily Mail, el implante mide tan sólo 1.8 cm con un peso de 2 gramos. Mediante una pequeña intervención quirúrgica con anestesia local, el interruptor se implanta dentro del escroto. El procedimiento tiene una duración de 30 minutos y permitirá a los hombres ”activar” o “apagar” su fertilidad.
Off-On
Al parecer, elegir tener un hijo o no, será como apretar el apagador de la luz, pues si el varón decide ser padre sólo tendrá que encender el interruptor que se encuentra en el escroto, lo que permitirá abrir el flujo del esperma para eyacular. Si se decide lo contrario, simplemente se deja apagado para mantener una infertilidad temporal.
De acuerdo al sitio web del dispositivo, cuando la válvula se mantiene cerrada, las células de esperma no podrán salir de los testículos para mezclarse con el semen durante la eyaculación, aunque los expertos señalan que una vez implantado el interruptor, los hombres tendrán que esperar entre tres y seis meses para que el cuerpo expulse el resto de las células de esperma que se encuentran en las glándulas seminales, por lo que inicialmente será necesaria la protección de un anticonceptivo.
Clemens Bimek indicó que la idea de la válvula se le ocurrió gracias a un documental que vio hace más de 20 años. Mencionó que habló con varios médicos sobre su idea, pero debido a que nadie lo tomó en cuenta, decidió hacerlo por cuenta propia hasta que lo perfeccionó y ahora su inventó se probará en 25 varones.
Por el momento, el interruptor sólo ha sido probado en el propio Bimek y muchos expertos se encuentran divididos sobre su posible eficacia.