El estilo de vida dice mucho de una persona e incluso es la base para prevenir o desarrollar diversos problemas de salud. Muchos de los malestares y dolores que se padecen hoy pueden ser generados por la relación que una persona establece consigo misma debido a la conexión de cuerpo y mente. Todo lo anterior conduce a las enfermedades psicosomáticas porque se trata de padecimientos reales y de diversa magnitud.
Pero antes, ¿qué son las enfermedades psicosomáticas?
Las enfermedades psicosomáticas son trastornos físicos que tienen su origen o están significativamente influenciados por factores psicológicos, emocionales o mentales.
En esencia, la mente no causa la enfermedad directamente, sino que predispone al cuerpo o exacerba condiciones físicas existentes a través de la vía del estrés y la disregulación fisiológica.
No se trata de que los síntomas estén “en la mente” de la persona o sean imaginarios, sino que el estrés, la ansiedad, la depresión u otras experiencias emocionales intensas se manifiestan físicamente en el cuerpo, causando daño o disfunción real en los órganos o sistemas.
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¿Cuál es la relación con el estrés?
El estrés es una reacción física de nuestro cuerpo, y al estar sometido constantemente a esta tensión, comienza a manifestar señales de desgaste. En una primera etapa pueden aparecer molestias como colitis o gastritis, padecimientos que suelen considerarse manejables.
No obstante, al mantener un nivel elevado de estrés por periodos prolongados, el organismo continúa expresando su agotamiento a través de afecciones más complejas como psoriasis, dermatitis e incluso migrañas.
Así mismo, cuando una persona atraviesa cuadros de estrés, su cuerpo comienza a segregar una sustancia llamada cortisol, conocida como la “hormona del estrés”.
Esta hormona cumple una función importante: ayuda al cuerpo a mantenerse activo y funcional ante situaciones exigentes.
Cuando el estrés es una de las causas y no la consecuencia
Desde el 2016 la Secretaría de Salud (SSA) ha estimado que entre el 16 y 30% de la población en el territorio nacional padece síndrome de colon o intestino irritable (colitis) generada comúnmente por estrés.
Los cuadros de estrés generan cambios bioquímicos que alteran el equilibrio interno del organismo. Uno de los primeros sistemas en manifestar estas alteraciones es el gastrointestinal, con síntomas como náuseas y vómitos.
Las principales manifestaciones psicosomáticas referidas son fatiga 29%, dolor de espalda 22%, dolor de cabeza 16%, problemas para dormir 13%, debilidad, dolor en articulaciones y en estómago, 11%.
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Recomendaciones para evitar afecciones por estrés
- Disminuir el consumo de cafeína y azúcares para disminuir la ansiedad.
- Consultar ayuda psicológica como orientación para aprender a manejarlo.
- Realizar ejercicio por lo menos 30 minutos al día para liberar endorfinas.
El tratamiento para las enfermedades de este tipo implica adentrarse desde hábitos como alimentación y sueño, identificación y control de focos de estrés e interacción negativa con el entorno” recalcó el experto.
Finalmente, el diagnóstico de las enfermedades psicosomáticas implica una evaluación médica exhaustiva para descartar otras causas puramente físicas. Una vez confirmada la influencia psicológica se debe empezar con el tratamiento y para obtener mejores resultados puede ser multidisciplinario.