De acuerdo con estadísticas de la Organización Mundial de la Salud (OMS), una de cada diez parejas presenta problemas de infertilidad. El desear procrear y no poder hacerlo representa un grave problema que inclusive puede llegar a provocar diferencias irreconciliables. Es por eso que a través de los años la tecnología ha buscado caminos alternos.
Dentro de las opciones actuales se encuentran las técnicas de reproducción asistida, las cuales son bastante controvertidas. Al respecto, el Dr. Juan Luis Alcázar de la Universidad de Navarra estuvo de visita en México. Para conocer más a detalles acerca del tema, en Saludiario tuvimos una entrevista en exclusiva con el especialista.
En primera instancia, el Dr. Alcázar es autor del estudio Riesgos para la salud en los niños concebidos mediante Técnicas de Reproducción Asistida. En la obra se analizan tantos los aspectos positivos como los negativos que pueden presentar los infantes.
Después de una profunda investigación pudimos confirmar algunos aspectos de los niños que nacen por medio de técnicas de reproducción asistida. Dentro de los principales están los defectos anatómicos, problemas perinatales y cromosomopatías. Los infantes tienen mayores probabilidades a desarrollar este tipo de afecciones que el resto de nacimientos.
Otro aspecto que menciona el especialista es que los niños tienen una probabilidad más elevada de cánceres hematológicos, principalmente leucemia.
Al respecto, se observó que los niños concebidos mediante este tipo de técnicas tienen errores en la impronta genética. Esto explica el por qué presentan un riesgo ante diversas enfermedades y problemas a corto, mediano plazo.
Se ha observado que el medio de cultivo de embriones en el laboratorio puede influir en estos cambios epigenéticos y de reprogramación en el embrión. Esto podría explicar los problemas detectados. Una cuestión clave que no está resuelta es la relacionada con las consecuencias a largo plazo. Todavía falta determinar si los pacientes pueden transmitir las alteraciones epigenéticas a su descendencia. Esto continúa generando preocupación en parte de la comunidad científica.
Por otra parte, el Dr. Alcázar señala que el especialista siempre debe hablar con sus pacientes antes de tomar una decisión. Se debe poner en una balanza los problemas que pueden presentar los niños y los deseos por querer tener un hijo. También se puede hablar acerca de otros caminos como la adopción y así evitar riesgos innecesarios.
