Prometen curarlo todo, pero no tienen pruebas científicas que los respalden: hablamos de los productos milagro que cada vez abundan más en el mercado mexicano.
Seguramente en tu consultorio habrás tratado con este problema en más de una ocasión. Es probable que varios de tus pacientes te hayan platicado de las pastillas que curan la diabetes, el té que elimina el Alzheimer, las cápsulas para curar el cáncer, el remedio casero para bajar de peso y hasta los aparatos que prometen tonificar todos los músculos sin esfuerzo.
Pero a juzgar por los spots publicitarios con que se anuncian estos productos, podríamos suponer que cualquier persona sabría detectar la diferencia entre lo que es real y lo que es pura fantasía.
Protege a tus pacientes de los productos milagro
Pero por desgracia lo anterior no es así, ya que todos los días muchas personas caen en las redes maliciosas y astutas de charlatanes que sólo buscan sacar provecho de la necesidad y desesperación de los pacientes que darían lo que fuera para encontrar una solución a sus problemas de salud.
A continuación te ofrecemos algunos consejos que puedes proporcionar a tu pacientes para que aprendan a identificar este tipo de productos y eviten caer en fraudes, y principalmente, para que no pongan en peligro su salud:
Prometen curar todas las enfermedades
Una gran parte de estos productos prometen curar una gran variedad de enfermedades, desde cáncer hasta la diabetes. Y al mismo tiempo, mencionan que son capaces de brindar otros beneficios como la pérdida de peso o aliviar dolores musculares o articulares. Son todo en uno. Enseña a tu paciente a no caer en este truco, ya que ningún medicamento o producto es capaz de curar un sinfín de enfermedades al mismo tiempo.
No requieren receta para su venta
Otra característica de estos artículos es que se pueden adquirir en mercados, tianguis y puestos ambulantes sin el menor decoro. Explica a tus pacientes que los medicamentos que tienen un respaldo científico y que han sido aprobados por organismos de salud, sólo se venden en farmacias o en locales cerrados.
Curan de la noche a la mañana
Pide a tus pacientes que desconfíen de los productos que prometen curar rápidamente una enfermedad, principalmente si ésta es crónica como la hipertensión o la diabetes. Si el producto tiene la leyenda “en pocos días” o “en poco tiempo”, entonces se trata con certeza de un producto milagro. Explícales que si un medicamento fuera capaz de curar realmente una o varias enfermedades al mismo tiempo, éste sería anunciado en revistas científicas y médicas especializadas y con toda seguridad se añadiría a las guías de práctica clínica para que los profesionales de la salud lo utilicen en favor de sus pacientes.
Productos naturales
Utilizar el término “natural” puede confundir a los consumidores y puede crear la idea que el producto es totalmente seguro. Por lo tanto debes informar a tu paciente que aunque sea natural, debe pasar por estudios y años de investigación para comprobar que es totalmente viable y seguro para las personas.
El consumo de productos milagro es un tema que debes tratar en el consultorio con tus pacientes, pues además del daño económico por comprar un producto que no sirve para nada, pueden afectar su salud bajo el riesgo de abandonar el tratamiento médico.
Así que antes de decidir, pide a tu paciente que primero piense en su salud.