El último mes de cada año es muy esperado por millones de personas porque está lleno de fiestas y celebraciones. Además implica días de asueto para descansar y romper con la rutina cotidiana. Pero también hay una parte negativa y es el estrés que se genera por navidad. Además no se limita al impacto emocional sino que también se relaciona con la parte económica.
Durante la temporada decembrina existen diversos gastos que se deben realizar y especialmente existe un fenómeno común que se repite alrededor del mundo. Se trata del alza de precios que afecta mucho más que el bolsillo.
¿Las fiestas de navidad pueden causar estrés?
Aunque las fiestas navideñas suelen ser retratadas como una época de alegría y celebración, en realidad son una fuente significativa de estrés y ansiedad para muchas personas. Este fenómeno se conoce a menudo como “estrés festivo” o “blues navideño”.
El estrés se deriva de la compleja combinación de demandas sociales, financieras y emocionales que se concentran en un corto período de tiempo.
¿Cuáles son los países con más estrés provocado por las fiestas de navidad?
Para obtener una respuesta Statista publicó los resultados de una encuesta global para identificar a las personas que tienen estrés por las fiestas de navidad y en especial por el aumento de precios.
Al revisar las opiniones por países hay muchas diferencias. En primer lugar se encuentra Rumania porque el 74% de la población piensa que hubo un drástico incremento en los precios de productos y servicios en comparación con el año pasado.
Dentro de este análisis también aparecen Italia con el 65% y Filipinas con el 63% dentro de los países con más estrés por las fiestas de navidad.
Además, en términos generales, casi 9 de cada 10 encuestados a nivel global dijo sentirse estresado ante el impacto del aumento de los precios y el 55% lo está más que el año pasado.
Principales causas de estrés navideño
El estrés durante Navidad no sólo es provocado por el aumento en el precio de los productos y servicios sino que es una acumulación de varias presiones.
Presión financiera
- Gastos excesivos: La obligación de comprar regalos, organizar cenas y asistir a eventos puede generar una tensión financiera considerable, llevando a muchas personas a endeudarse.
- Administración del presupuesto: El desafío de equilibrar las cuentas mientras se cumplen las expectativas de consumo.
Presión social
- Planificación exhaustiva: Organizar comidas, coordinar horarios de viaje, decorar la casa y preparar los regalos consume mucho tiempo y energía.
- Obligaciones sociales: Sentirse obligado a asistir a múltiples fiestas o a pasar tiempo con familiares con los que se tienen relaciones tensas o conflictivas.
- Falta de tiempo: La dificultad para mantener las rutinas diarias (trabajo, ejercicio, descanso) mientras se suman las actividades festivas.
Presión emocional
- Idealización de la Navidad: Existe una expectativa cultural e idealizada de que la Navidad debe ser una época de “felicidad perfecta”, paz y armonía familiar. Cuando la realidad no cumple estas expectativas (discusiones, soledad, tristeza), la decepción y el estrés aumentan.
- Recuerdos dolorosos: La Navidad puede acentuar los sentimientos de pérdida o tristeza por la ausencia de seres queridos fallecidos o por rupturas recientes.
- Soledad: Paradójicamente, las personas que están solas sienten más presión y aislamiento durante una época que enfatiza la reunión familiar y de pareja.
Por todo lo mencionado, la Navidad es una época con un gran potencial de estrés porque exige una alta demanda de recursos durante un período bastante corto y además influyen las expectativas poco realistas de perfección y alegría que tienen algunas personas.
