En el marco del Día Mundial contra la Hepatitis, la Dra. Scherezada Mejía Loza, jefa de la Clínica de Hígado del Hospital Juárez de México, informó que la hepatitis es una infección que puede evolucionar por varios años sin presentar síntomas, por lo que si no es atendida a tiempo, puede ocasionar cirrosis o cáncer hepático.
“”Esta enfermedad es causada principalmente por el alcoholismo, consumo de alimentos contaminados y uso inadecuado de medicamentos. Otras formas de contagio son el uso de jeringas contaminadas, perforación del cuerpo en condiciones insalubres, tatuajes y el contacto accidental con agujas infectadas.
Mejía Loza hizo un llamado a los profesionales de la salud para que, en caso de sospechar que un paciente tenga hepatitis, realicen la detección mediante una prueba de función hepática.
La especialista destacó que los tipos de hepatitis A y E son los más frecuentes y que por lo general, éstos se adquieren por beber agua y/o alimentos contaminados, por lo que pidió a los médicos familiares estar al tanto de estos casos en sus respectivos consultorios médicos, así como dar recomendaciones de una alimentación saludable a sus pacientes.
En cuanto a la hepatitis C, dijo que ésta es la principal causa de cirrosis y cáncer de hígado y se adquiere a través del contacto con la sangre contaminada o por relaciones sexuales sin protección. “Desde 1992 tenemos el control de calidad de la sangre disponible para transfusión, lo que ha evitado nuevos contagios por esta vía”, señaló.
“Es importante que los profesionales de la salud recomienden a sus pacientes mejores medidas de higiene, adoptar estilos de vida saludable y realizar más ejercicio para disminuir el riesgo de contagio de este padecimiento.