Durante todo el mes de octubre el tema central es el cáncer de mama y uno de los objetivos es hablar acerca de todo lo relacionado con la enfermedad. Para la detección de tumores la prueba estándar es la mastografía pero además también existe el ultrasonido de mama. Lo que algunas veces se ignora son las similitudes y diferencias entre ambas.
Uno de los principales objetivos en la lucha contra el cáncer de mama es la detección oportuna del tumor. A la fecha 7 de cada 10 nuevos casos se identifican en etapas avanzadas y cuando eso ocurre hay menos probabilidades de supervivencia.
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¿Para qué sirve una mastografía?
La mastografía es la herramienta más reconocida para detectar el cáncer de mama de manera temprana. La máxima indicación es que a partir de los 40 años todas las mujeres deben someterse a esta prueba de detección de manera anual, incluso si no tienen síntomas.
“Una mastografía utiliza rayos X para obtener imágenes del tejido mamario mediante la compresión del seno desde distintos ángulos. De arriba hacia abajo y de lado a lado. Nos da una visión general y es como una especie de mapa del tejido mamario”, explica la Dra. Kelli Ha, radióloga de mama en el Hospital Houston Methodist.
Mastografía y ultrasonido de mama, ¿por qué no son lo mismo?
A pesar de lo anterior, en algunos casos el personal médica también solicita un ultrasonido de mama. Aunque tiene algunas similitudes con la mastografía en realidad es una prueba diferente.
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¿Qué es un ultrasonido de mama?
Si la mastografía es un mapa del tejido mamario, el ultrasonido de mama sería como una lupa. Sirve para explorar áreas difíciles de ver o para observar con mayor detalle algo que apareció en cada mujer.
“En lugar de rayos X, un ultrasonido de mama utiliza ondas sonoras para visualizar el tejido mamario. No es necesario comprimir el seno durante esta prueba”, explica la Dra. Ha.
¿En qué casos se recomienda un ultrasonido de mama?
- Tener mamas densas.
- Tener un alto riesgo de cáncer de mama (por ejemplo, antecedentes familiares fuertes).
- Evaluar un hallazgo anormal visto en una mastografía de detección.
- Guiar una biopsia de mama.
- Evaluar una infección mamaria.
Una de las razones más comunes para necesitar un ultrasonido después de una mastografía es precisamente tener tejido mamario denso.
¿El ultrasonido es mejor para las mamas densas?
El tejido mamario denso puede hacer más difícil detectar cáncer en una mastografía aunque no imposible. Mientras que con un ultrasonido los tumores y el tejido denso suelen diferenciarse con mayor claridad.
“Las mujeres que tienen mamas muy densas pueden beneficiarse de un ultrasonido como complemento del tamizaje”.
A pesar de lo anterior, la máxima recomendación para todas las mujeres, incluso las que tienen mamas densas, sigue siendo realizarse una mastografía de detección cada año a partir de los 40 años.
“El ultrasonido es sólo un estudio complementario que nos da otra manera de asegurarnos de no pasar por alto hallazgos sutiles que podrían quedar escondidos en el tejido mamario denso”, señala la Dra. Ha.
¿Un ultrasonido puede reemplazar a una mastografía?
El ultrasonido de mama tiene muchas ventajas, pero no es un sustituto de la mastografía. Los datos del Colegio Americano de Radiología muestran claramente que la mejor forma de detectar cáncer de mama en etapas tempranas —cuando es más fácil de tratar— es realizarse una mastografía anual a partir de los 40 años.