La startup OpenEvidence, entrenada con fuentes médicas como JAMA y The New England Journal of Medicine, consolida su liderazgo en inteligencia artificial clínica tras recaudar 200 millones de dólares en una ronda liderada por Google Ventures. Su valoración se duplicó en tres meses, reflejando el auge de la IA especializada en el sector salud.
La IA médica entra en una nueva fase de inversión
OpenEvidence, una plataforma de inteligencia artificial diseñada para asistir a médicos y enfermeros en la toma de decisiones clínicas, anunció una nueva ronda de financiamiento por 200 millones de dólares, alcanzando una valuación de 6 mil millones.
El dato, publicado por The New York Times, llega apenas tres meses después de que la compañía levantara otros 210 millones con una valoración de 3.5 mil millones, lo que supone un incremento del 71% en su valor de mercado en menos de un trimestre.
La ronda fue liderada por Google Ventures, con la participación de fondos como Sequoia Capital, Kleiner Perkins, Blackstone, Thrive Capital, Coatue Management, Bond y Craft.
Desde su fundación en 2022, OpenEvidence ha multiplicado su volumen de uso clínico: más de 15 millones de consultas mensuales, el doble que en julio pasado.
Cómo funciona el “ChatGPT de los médicos”
OpenEvidence se entrena con contenido científico revisado por pares, proveniente de revistas médicas de alto impacto como JAMA o The New England Journal of Medicine.
A diferencia de los chatbots generalistas, su modelo solo responde sobre información médica verificada, lo que reduce el riesgo de errores clínicos.
La plataforma es gratuita para profesionales verificados y se sostiene mediante publicidad segmentada dentro del sector salud.
Comparativa: el auge de la IA médica frente a otras plataformas
El caso de OpenEvidence recuerda al crecimiento de Hippocratic AI, otra startup enfocada en IA sanitaria, que en 2024 alcanzó una valuación de 1.7 mil millones tras demostrar mejoras en la precisión de diagnósticos por voz.
Mientras que Hippocratic AI se centra en la comunicación paciente-profesional, OpenEvidence busca posicionarse como la fuente confiable de evidencia clínica instantánea, integrando su tecnología directamente en sistemas hospitalarios y de historia clínica electrónica.
La tendencia refleja una clara verticalización de la inteligencia artificial, donde el conocimiento especializado y la validación profesional son los nuevos factores de confianza en la medicina digital.
Implicaciones para el futuro de la práctica médica
Con el rápido avance de modelos especializados, se espera que herramientas como OpenEvidence transformen la educación médica continua, la consulta diagnóstica en tiempo real y la reducción de errores clínicos.
Sin embargo, los expertos advierten que la integración ética y la supervisión regulatoria serán claves para evitar la dependencia excesiva de la IA en la práctica clínica.