Oriol Mitjà es un médico investigador de origen español especializado en enfermedades infecciosas tropicales, quien en los últimos 6 años ha buscado transformar el diagnóstico y tratamiento del pian, enfermedad crónica y debilitante causada por treponema, la cual podría ser tratada con sencillas pastillas de azitromizina, según revelan los estudios en los que ha participado este profesional de la salud.
Actualmente Mitjà trabaja en el Instituto de Salud Global de Barcelona en España y en el Centro Médico de Lihir en Papúa Nueva Guinea, donde comenzó actividades en 2010, año a partir de cual se ha dedicado a detectar y estudiar numerosas enfermedades, pero particularmente pian, padecimiento que se transmite por contacto directo y que puede ocasionar deformidad, afectando principalmente a niños de entre 6 y 10 años de edad, según ha reportado la Organización Mundial de la Salud (OMS).
La enfermedad que se transmite en regiones boscosas cálidas, húmedas y tropicales de países pobres de África, Asia, América Latina y el Pacífico, no suele ser conocida entre los médicos de naciones “ricas”, pese a ser padecida por cerca de 40 millones de personas en el mundo, de las cuales 75 por ciento son menores de 15 años, reporta la OMS.
Por ello, Mitjà, quien también es técnico en este organismo internacional, forma parte de una estrategia que pretende eliminar dicha afección para 2020, por lo que, de lograrse este objetivo, sería la segunda enfermedad humana erradicada a nivel mundial, después de la viruela.
Sin embargo, hasta el momento el proyecto enfrenta duros problemas económicos, ya que, por ejemplo, en 2015 el periódico El País denunciaba que la millonaria farmacéutica Pfizer se había negado a donar el medicamento para suministrarlo a poblaciones africanas pobres, mientras la Comisión Europea, el Ministerio de Economía español, el gobierno australiano y la Wellcome Trust británica no habían querido apoyarlo económicamente, de modo que en lugares como la isla de Lihir, reconocida por ser rica fuente de petróleo y oro con una población en pobreza, la financiación depende de la minera Newcrest, la cual entrega 25 mil euros anuales.
Al respecto, la OMS señala que desde 2003 los casos en Ecuador e India han cesado pero, históricamente, desde la década de 1950 al menos 88 países habían sido afectados por la enfermedad; sin embargo, en la actualidad, es endémica sólo en 13 naciones, por lo que se requiere apoyo para aplicar su estrategia de erradicación.