La salud pública; esta resguardada dentro de las responsabilidades del gobierno Federal de México y sus instituciones. Que buscan de manera integral mejorar las condiciones de vida de los ciudadanos, generando bienestar y oportunidades a corto, mediano y largo plazo; que se irradian paulatinamente a toda la sociedad. Además, es un compromiso de todos; ya que el autocuidado, los hábitos saludables y la prevención; nos alejan de los servicios de salud y sus altos costos.
Actualmente; México se enfrenta a una pandemia mundial formada por un virus poco predecible, que ha puesto a tambalear; no solo la infraestructura sanitaria y la economía, sino también la capacidad de resiliencia, transformación y empuje de los mexicanos. Sin embargo, es necesario mirar a grueso modo, que le espera a la salud pública a largo plazo.
Programas que vinculan la comunidad a largo plazo
En la época de la revolución mexicana, las defunciones no solo se dieron por los caídos en el campo de batalla, sino también por la falta de alimentos, contagios y enfermedad. Poniendo a prueba los estamentos gubernamentales con compromisos sobre el sistema de salud, la protección igualitaria y la puesta en marcha de un servicio de calidad, atención y protección financiera. Sin embargo, ha pasado el tiempo y aún falta mucho por hacer.
La conservación de la salud y el bienestar de todo un país, es una tarea de cada día. Por tanto, el gobierno nacional desarrolla programas de alimentación, actividad física, lactancia materna y vacunación, entre otros. Abonando el camino para crear estilos de vida sanos que protejan a la población más vulnerable, que se aqueja de enfermedades transmisibles, desnutrición y problemas generados por la contaminación y el medio ambiente. (Secretaria Salud Mexico, s.f.)
También se le ha dado mucha importancia a la formación de los profesionales de la salud y todo el personal involucrado en la atención sanitaria. Ya que en sus manos está la prevención, curación y supervisión de toda una sociedad. Además, este mismo personal hace una difusión masiva sobre bienestar mental, sustancias psicoactivas, epidemiologia y nutrición. Al tiempo que cubre los temas de sexualidad y reproducción.
Retos que requieren inversión
La salud pública, demanda reforzar actividades de vigilancia y control, donde se midan los avances de las regiones, los cambios demográficos, la migración, el envejecimiento de la población, las consecuencias del cambio medioambiental y la inequidad. Dando cabida a estudiar los problemas más importantes que vive la población, la prevalencia de las dolencias, la falta de inclusión a los servicios sanitarios y los costos asociados. (OPS, s.f.).
Uno de los retos más grandes con que se enfrenta el sistema de salud mexicano a largo plazo, es proteger la salud de las personas de la tercera edad. Ya que el Instituto Nacional de estadística y Geografía de México (INEGI), describe que el 12,7% de la población del 2019 era mayor de 60 años (Inegi, 2019). Más aún cuando gran parte de esa población no cuenta con seguridad social, ni con una pensión contributiva.
El envejecimiento de la población, acompañado de malas costumbres alimentarias, el consumo desalentador de sustancias psicoactivas y la pobreza, llevan a resquebrajar la fuerza laboral, generar discapacidades y aumentar los problemas neurodegenerativos, que demandan tratamientos costosos y ponen a prueba el gobierno a corto y largo plazo.
