Con demasiada frecuencia emergen nuevos conceptos en el ámbito de la salud que prometen cambiar nuestra vida mediante la creación de hábitos benéficos. En los últimos meses ha surgido un nuevo término en el área de la nutrición al que muchos ya se están subiendo con la expectativa de mejorar su estilo de vida. Se trata del mindiful eating, comer conscientemente.

Este terminó se refiere a “una filosofía que nos invita a llevar nuestra atención momento a momento en ámbitos relacionados con la alimentación, es decir, significa elevar nuestra consciencia observando nuestros patrones de ingesta con curiosidad y aceptación, siendo conscientes de cómo tomamos las decisiones de qué alimentos comer, cómo y cuándo”, asegura Javier García Campayo, coordinador del Máster de Mindfulness de la Universidad de Zaragoza y miembro del Servicio de Psiquiatría del Hospital Miguel Servet de Zaragoza.

Este concepto nos lleva a plantearnos la manera en que nos relacionamos con la comida: muchas personas comen por estrés, por aburrimiento o incluso como un pasatiempo, pero ¿cuándo en realidad se alimenta el cuerpo por hambre y por la necesidad de nutrirlo y darle mayor energía?

El mindiful eating busca romper la barrera del comer por glotonería, por antojo o por impulso para llevar a cabo esta acciono como parte de una conciencia que busca alimentarse porque el cuerpo lo requiere en los momentos y de la forma adecuada. Según el mindful eating, el cerebro es capaz de diferenciar cuando el cuerpo siente hambre física o por antojo o por ocio. Pero con el paso de los años y a causa de los hábitos que el ser humano ha adquirido al hacer del hambre un pasatiempo, esa capacidad se ha perdido. 

Esta nueva tendencia al comer busca que seamos capaces de reconocer cuando el hambre es netamente física y de esa manera alimentar el cuerpo cuando en realidad lo necesita para nutrirse de manera adecuada. Es decir, se busca controlar a la mente para no caer en antojos innecesarios y el cuerpo obtenga los beneficios necesarios en el momento preciso. 

El mindful eating no se basa en complicadas dietas sino más bien en pequeños consejos que buscan hacer del acto de comer algo de mayo provecho y, sobre todo, de manera controlada. Es un estilo de vida en donde la mente aprende a controlarse a sí misma, conocer mejor tu organismo y actúas de manera más responsable. En términos generales busca hacer que tu cuerpo y tu mente estén alineados para darte el bienestar que mereces y necesitas. 

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