Durante la conferencia desde Palacio Nacional la presidenta Claudia Sheinbaum lanzó varias declaraciones en contra del Seguro Popular. Incluso aseguró que estaba lleno de corrupción y manejos internos dudosos. Además remató al afirmar que ahora el país se encuentra mejor con el IMSS Bienestar.
La salud es uno de los rubros que genera debate a nivel nacional porque durante los últimos años ha estado rodeada de controversias. De hecho, el gobierno anterior aseguró que “México tendría un sistema de salud mejor que el de Dinamarca” y para algunas voces jamás se consiguió.
Sheinbaum se lanza contra el Seguro Popular
El problema del día se generó cuando una reportera cuestionó a la mandataria al asegurar que existen 15 millones de recetas de hospitales públicos que no han sido surtidas y añadió que era algo que no ocurría con el Seguro Popular.
A manera de respuesta, Sheinbaum dijo que no estaba de acuerdo y afirmó que el modelo de atención que antes se basaba en la monopolización para la compra y distribución de medicamentos. Incluso aseguró que algunas personas se beneficiaron y hoy son empresarios millonarios que hasta tienen canales de televisión.
Mientras que ahora, desde la llegada del IMSS Bienestar todo ha cambiado. La mandataria declaró que la salud debe ser gratuita para todos los mexicanos y es lo que hoy se ofrece a la población.
También hizo énfasis en que las antidades que no se han añadido al IMSS Bienestar cobran sus servicios médicos y es algo a lo que se opone porque la salud es un derecho y nadie debería pagar por su atención.
De igual forma mencionó que uno de los objetivos actuales es ofrecer una atención médica basada en el humanismo y es algo que antes no existía. Para tal efecto se han implementado nuevos programas y aunque todavía hay algunos puntos pendientes recalcó que se avanza en la dirección correcta.
¿Qué era el Seguro Popular?
El Seguro Popular fue un esquema de aseguramiento público de salud en México implementado en el 2004. Su objetivo principal era brindar acceso a servicios de salud a la población que no contaba con seguridad social como trabajadores informales, desempleados y familias de bajos recursos.
¿Cómo funcionaba?
- Afiliación: Las personas que no estaban afiliadas a instituciones como el IMSS o el ISSSTE podían registrarse al Seguro Popular. Se requería presentar cierta documentación (identificación, CURP, comprobante de domicilio, etc.) y en algunos casos, se realizaba un estudio socioeconómico para determinar si debían realizar una aportación económica, aunque en la práctica, muchas personas eran registradas sin costo.
- Financiamiento: El Seguro Popular se financiaba a través de una combinación de recursos federales, estatales y, en menor medida, por las aportaciones de los afiliados (cuando aplicaba). El gobierno federal realizaba una aportación anual por cada persona afiliada.
- Paquete de servicios: Ofrecía un catálogo de servicios de salud conocido como el Cuadro Básico de Intervenciones del Sistema de Protección Social en Salud, que cubría un amplio rango de enfermedades y condiciones, desde atención primaria hasta intervenciones de alta especialidad. Este paquete se actualizaba periódicamente.
- Red de atención: Los afiliados podían recibir atención médica en los centros de salud y hospitales públicos pertenecientes a las secretarías de salud estatales. En algunos casos, se podían establecer convenios con instituciones privadas.
- Protección financiera: Uno de los objetivos clave era reducir el gasto de bolsillo de las familias en salud y protegerlas del riesgo de empobrecimiento por motivos de enfermedad.
¿Por qué desapareció?
El Seguro Popular fue formalmente derogado en el 2020 y sustituido por el Instituto de Salud para el Bienestar (INSABI). Las razones principales de su desaparición, según el gobierno federal, fueron las siguientes:
- Inequidades y corrupción: Se argumentó que el Seguro Popular presentaba inequidades en la distribución de recursos entre los estados y que existían problemas de corrupción y falta de transparencia en su operación.
- Limitaciones en la cobertura y calidad: A pesar de su amplia afiliación, se señaló que en la práctica existían limitaciones en el acceso efectivo a los servicios, falta de medicamentos e insumos, y variaciones significativas en la calidad de la atención entre diferentes regiones del país.
- Ineficiencia administrativa: Se criticó su estructura administrativa, considerándola compleja y poco eficiente. Se argumentaba que los recursos no siempre llegaban de manera oportuna y adecuada a los centros de salud.
- Promesa de un sistema universal y gratuito: El gobierno de Andrés Manuel López Obrador propuso la creación del INSABI como un paso hacia un sistema de salud universal, único y gratuito, buscando eliminar las diferencias entre asegurados y no asegurados.
Es importante mencionar que el INSABI no logró cumplir sus metas y un par de años después de su creación también desapareció para convertirse en el IMSS Bienestar.