Las enfermedades cardiovasculares son aquellas que afectan a la estructura y el funcionamiento del corazón. En México, forman parte de las enfermedades más comunes, así que es importante que conozcas más sobre ellas. A continuación te vamos a mostrar algunas de las principales.

Arritmias, una de las principales enfermedades cardiovasculares

Seguro que lo sabes, pero el corazón es un órgano increíble. Este late a un ritmo controlado y constante, en torno a las 60-100 veces por minutos. Esto puede traducirse en más de 100 mil latidos al día. Aunque hay ocasiones en las que el corazón no lleva este ritmo constante y se tiene que hablar de arritmias. Estas pueden producir irregularidades en el ritmo cardíaco o un latido muy lento o rápido.

Arteriopatía coronaria

Esta es una enfermedad vascular común, pero son muchas las personas que nunca han escuchado hablar de ella. Pero, ¿en qué consiste? Se trata del endurecimiento de la arteria que da el oxígeno vital y los nutrientes al corazón. Este endurecimiento se conoce como ateroesclerosis.

Afección cardíaca congénita, otra de las enfermedades cardiovasculares a tener en cuenta

Se trata de un defecto en una o más estructuras del corazón o los vasos sanguíneos. Esta afección se genera antes del nacimiento y la suelen presentar en torno a 8 de cada 1000 niños, aunque aún sigue siendo común entre las enfermedades cardiovasculares.

Pericarditis

Es una condición rara en la que el revestimiento que envuelve el corazón se inflama. Usualmente, suele aparecer a causa de una infección.

Miocardiopatías, también entre las enferemedades cardiovasculares comunes

Las miocardiopatías incluyen a las enfermedades del músculo cardíaco. Las personas con esta condición suelen tener corazones más grandes, más rígidos o más gruesos de lo normal. El resultado es que el corazón no bombea sangre adecuadamente. Sin el tratamiento adecuado, puede empeorar con el paso del tiempo.

Insuficiencia cardíaca

Es un término que, al leerlo, puede resultar bastante aterrador. Aunque muchos lo creen, no significa que el corazón se ha detenido o ha dejado de funcionar sino que lo que significa es que el corazón no bombea tanto como debería y esto puede llegar a ocasionar la retención de agua y sal, provocando la inflamación y falta de aire en quienes la padecen.