Hoy en día, encontrar profesionales sanitarios dedicados a su especialización es fácil. Aunque muchos olvidan un aspecto clave que les pueden hacer triunfar en el sector y es la importancia de la experiencia que le pueden ofrecer a sus pacientes. ¿Quieres saber cómo lograr una buena experiencia del paciente? A continuación te ofrecemos las fases por las que pasa el proceso.
Beneficios de cuidar la experiencia del paciente
Este es un concepto relativamente nuevo aunque ha sido aplicado por doctores y clínicas de todo el mundo, siendo un término crucial para construir su reputación o fidelizar pacientes. Y es que cuando un paciente tiene una buena experiencia, su compromiso con el tratamiento aumenta y los resultados clínicos son mejores, convirtiéndose así en algo muy positivo para la relación médico-paciente.
Son siete etapas las que conforman el ciclo
A la hora de hablar de experiencia del paciente, habría que tenerse en cuenta las diferentes etapas del viaje que recorre la persona que acude a tu clínica, las cuales son las siguientes que te enumeramos:
- Búsqueda de un especialista: suele iniciarse en Google a través de una búsqueda del tipo: “nombre del doctor, síntoma o especialidad médica”. Estar visible en Google es primordial.
- Elección del especialista adecuado: el paciente evalúa, en esta etapa, a los diferentes especialistas que encontró y elige al que considera más calificado. Tu reputación profesional marcará la diferencia.
- Reserva de cita: la inmediatez es decisiva en este paso. Cuanto más sencillo y rápido sea el proceso de reservar cita, mayores probabilidades tendrás de que se conviertan en pacientes.
- Comunicación pre-consulta: tras la reserva de cita, debes establecer un protocolo de seguimiento con el que ayudar y orientar a tus pacientes hasta el día de la cita. Es un pequeño detalle pero que marca la diferencia en la experiencia de tus pacientes.
- Visita médica: es el momento del contacto directo con tu paciente, bien a través de una consulta personal o virtual. Es una de las etapas más importantes para la experiencia de este.
- Post-consulta: Aunque ya hayas visto al paciente y le hayas prescrito el tratamiento, la experiencia de este continúa ayudándoles a mantenerse motivados y mostrándoles que su opinión te importa. Por ejemplo, puedes enviarles una encuesta.
- Fidelización y promoción: es la última etapa. La experiencia del paciente termina cuando deja una reseña sobre la experiencia que vivió contigo y te recomienda a amigos y/o familiares que pueden convertirse en tus pacientes.
Con todo ello, lo que queda de manifiesto es que la experiencia que brindes a tus pacientes va a ser fundamental para tu éxito profesional.