Navidad es una época emocionante y sentimental para muchos pacientes. Es el tiempo de convivir con familia y amigos. De crear y estrechar los lazos de amistad, amor y fidelidad. En cierta medida, es el momento del año cuando se reafirma la marca que otras personas dejan en la vida de cada uno. Por eso, un tatuaje es un símbolo muy adecuado para sintetizar este sentimiento.
La práctica del tatuaje es muy extensa en México y el mundo. De acuerdo con la Fundación Unidos por Una Vida Mejor, una de cada 10 personas tiene uno. En total, representa 12 millones de ciudadanos en el territorio nacional.La mayoría de estos pacientes no tienen más de 20 años, por lo que a veces no tienen los recursos financieros necesarios para una atención de calidad. Esto los deja vulnerables a la transmisión de la Hepatitis C.
Hepatitis C: un riesgo persistente en México
En noviembre, la Fundación apuntó que existen todavía hasta 600 mil pacientes de Hepatits C en México. Una fracción de ellos, contrajeron la enfermedad por malas prácticas de salubridad al hacerse un tatuaje. Por esta circunstancia, y otras similares, el 95 por ciento de la población no está consciente de su condición. A pesar de ya existir una cura, menos de uno de cada 100 se somete a terapia. Ante este hecho, han pedido al nuevo gobierno tomar cartas en el asunto.
Además, la organización pide a los profesionales de la salud proteger a sus pacientes. La Fundación no se pronunció en contra de hacerse un tatuaje. Sin embargo, sí advirtió que debe escogerse con cuidado el local donde se realizan estas marcas. Sus recomendaciones se resumen en cinco puntos específicos. Diseño, seguridad, costo, atención al detalle y prevención.
Te presentamos a continuación una infografía realizada por la Fundación. En ella, podrás encontrar los puntos que deberían vigilar tus pacientes antes de hacerse un tatuaje:
