Un error que suelen cometer las personas y tú lo puedes comprobar con tus pacientes es pensar que la salud sólo se refiere al aspecto físico. Por tal motivo, se suele subestimar la parte mental y eso deriva en el desarrollo y evolución de problemas que se agravan y comprometen la integridad de cada individuo. Para hablar de un bienestar pleno es necesario enfocarse en todos los aspectos y nunca descuidar uno por enfocarse en el otro.
Para tener en cuenta, la Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que existen alrededor de mil millones de personas con algún trastorno mental. Lo anterior significa que alrededor de una de cada siete personas en el planeta sufre de este tipo de problemas. Aunque uno de los inconvenientes es que a la fecha persisten los estigmas en torno a la salud mental. Como consecuencia, muchas personas se sientan intimidadas y evitan solicitar ayuda especializada.
Problemas de salud mental en México
En ese sentido, México es el segundo país con mayor estigma y discriminación hacia las personas con problemas de salud mental. Por lo mismo, apenas el uno por ciento de los afectados acude con un psiquiatra de manera regular. Esto refleja en gran medida la necesidad de apertura a la información sobre los trastornos mentales para incentivar un diagnóstico oportuno y evitar que quienes los padecen, se sientan obligados a esconderlo.
A partir de todo lo anterior, te compartimos cinco de los principales mitos sobre salud mental que persisten en nuestro país. Procura aclarar todos en tus pacientes y si detectas sospechas de algún tipo de trastorno es necesario que lo hables y lo dirijas con algún especialista.
Mito: No tengo riesgos de problemas de salud mental porque soy una persona sana
Realidad: Los problemas de salud mental son más comunes de lo que se piensa y cualquiera los puede desarrollar. Actualmente se estima que uno de cada cuatro mexicanos sufre o sufrirá algún trastorno durante su vida. Algunos factores como los sociales, económicos y biológicos contribuyen a su aparición y desarrollo.
Mito: Las enfermedades mentales son irreversibles
Realidad: Aunque en muchas ocasiones no son sencillas de tratar, tampoco significa que no tengan una solución. Con el apoyo de profesionales de la salud y los tratamientos adecuados, las enfermedades mentales se pueden atender.
Mito: Las enfermedades mentales son contagiosas
Realidad: Ninguna enfermedad mental se contagia. Siempre surgen a partir de diversas circunstancias, en diferentes entornos y pueden sucederle a toda persona, sin importar, sexo, edad, condición económica o ideológica.
Mito: Los niños no experimentan problemas de salud mental
Realidad: Incluso los niños pueden padecer algún trastorno mental. Estos son producto de la interacción de factores biológicos, psicológicos y sociales. Lo primordial es una detección oportuna para determinar el mejor tratamiento para cada caso.
Mito: Los trastornos mentales vuelven a las personas violentas y peligrosas
Realidad: Por el contrario, debido a su condición clínica, es más probable que una persona con un problema de salud mental se lastime a si misma que a otra. El mito de que una persona con un trastorno mental sea más propensa a lastimar a otra, es uno de los más dañinos, pues por temor a ser percibidas como agresivas, las personas se aíslan y el entorno en donde se encuentra, suele rechazarlas.
