Durante las fiestas decembrinas es muy común que la mayoría de la población caiga en excesos al momento de comer. Aunque puede parecer una práctica pequeña e insignificante, en realidad representa un severo riesgo para la salud. La situación se complica cuando se trata de personas con diabetes. Por tal motivo es necesario que hables con tus pacientes acerca de los cuidados que deben tener durante estas fechas.
De acuerdo con la Federación Internacional de Diabetes, en México al menos 12 millones de personas han sido diagnosticadas con este padecimiento. Además se estima que por cada persona que vive con diabetes en el mundo, hay otra que no está diagnosticada o no lo sabe.
Automonitoreo, la mejor forma de protección
Vivir con diabetes no es un obstáculo. Seguir un plan de automonitoreo de glucosa e informarse sobre las propiedades de los alimentos y las cantidades de consumo apropiadas hará que tus pacientes puedan disfrutar de las fiestas.
De acuerdo con Aldo Ferreira, endocrinólogo e investigador en diabetes, una de las claves radica en el automonitoreo y la educación sobre el padecimiento. De esta manera cada persona puede tomar decisiones conscientes e informadas con respecto a los alimentos que ingiere. Con esto se evita que la glucosa se eleve o disminuya de manera inesperada, lo que puede derivar en hiperglucemias o hipoglucemias.
Monitorear los niveles es bastante sencillo, se puede hacer con un glucómetro casero en tres sencillos pasos: pinchar el dedo para obtener una muestra pequeña de sangre, colocarla en una tira reactiva y medir el resultado con el dispositivo. Sin embargo, muchas veces, la prueba toma más tiempo de lo esperado y tiene que repetirse por errores de aplicación, lo que pasa por lo menos en promedio 96 veces al año en pacientes con diabetes.
Cuando el paciente se apega a su tratamiento y lleva un control de su glucosa a través del automonitoreo, la frustración respecto al cuidado de los alimentos que ingiere disminuyen.
