Durante al menos las últimas dos décadas se ha expandido un movimiento conformado por grupos antivacunas. Se trata de personas que sin una base científica se oponen a recibir cualquier tipo de inmunización. En parte tuvo su origen por un artículo que afirmaba que la inoculación causaba autismo en los niños. Poco después se confirmó el error y la falta de rigor científico en el trabajo pero fue demasiado tarde. Con la aparición de la Covid-19 se alertó que este problema podría resurgir y ahora existen algunos médicos implicados.
En ese sentido, todo tiene su origen en la región de Liguria en Italia. Con base en una investigación se acusa que dos doctores que se han negado a recibir la vacuna han contagiado al menos a 12 pacientes. Aunque no se ha comprobado que el hecho ya ha causado fuertes molestias en todo el país.
A reserva de que se confirme el origen de los contagios, el Primer Ministro del país, Mario Draghi, ya presentó una propuesta. Con base en El Economista, el mandatario ha propuesto que se castigue a cualquier trabajador de la salud que se niegue a ser inmunizado.
También se menciona que hasta el momento son muy pocos los galenos que se oponen a ser vacunados. Aunque al problema es que al menos con uno que mantenga esta postura se afecta a todo su alrededor.
Al respecto, la legislación actual recomienda que todas las personas reciban la vacuna contra la Covid-19 aunque no es una obligación. Eso significa que cualquier persona está en su libre voluntad de elegir si la quiere o no y a nadie se le puede castigar o imponer multas.
La legislación de Italia es bastante similar a la de México en el sentido de que la vacuna no será obligatoria. Aunque a raíz de las sospechas actuales es que se plantea que los médicos sean una excepción en la nación europea. Todo parte del hecho del contacto directo que mantienen con pacientes de diversas enfermedades y padecimientos. Por lo mismo se requiere que se encuentren sanos y en perfectas condiciones para evitar exponer a los demás.
¿Por qué se han opuesto las personas?
Ahora bien, apenas hace unas semanas se dio a conocer que los médicos de varios países estaban en contra de ser vacunados con el biológico de AstraZeneca. Todo es debido a que la Unión Europea designó el biológico de AstraZeneca como exclusivo para los trabajadores de la salud. Aunque a raíz de las dudas sobre su eficacia y presunta asociación con casos de trombosis es que algunos doctores no quieren sta opción y prefieren otra de las disponibles como la de Pfizer o Moderna.
Mientras que por otra parte, un motivo más por el que algunas personas, sin importar si son médicos o no, se oponen a recibir la inoculación es por motivos religiosos. Durante algún momento se infirió que algunas opción eran fabricadas con fetos humanos y eso provocó la queja de organizaciones conservadoras. Aunque al final se negó que así fuera y se ha hecho énfasis en que todos deben recibir la inmunización cuando les corresponda para evitar cuadros severos de la enfermedad.
