A la fecha México acumula 671 mil 716 casos y 71 mil 049 defunciones por Covid-19. Con base en la Secretaría de Salud (SSa), durante las últimas seis semanas ha existido una tendencia a la baja. Pero aunque en primera instancia es un aspecto positivo, se prevé que durante los siguientes meses exista un repunte de infectados debido al inicio de la temporada de otoño. Con eso, también es cuando aumenta la incidencia de influenza en nuestro país.
En ese sentido, uno de los mayores inconvenientes es que la Covid-19 y la influenza comparten varios de los síntomas principales. Por lo tanto puede provocar confusión en el personal médico y eso derivar en diagnósticos erróneos. Al no ofrecer un tratamiento adecuado se puede comprometer la salud del paciente e inclusive causar su fallecimiento.
Medidas para no confundir enfermedades
Por todo lo mencionado, el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) aseguró que ya trabaja en algunas estrategias para evitar errores. La primera y más importante es que se aplicarán pruebas rápidas dentro de las unidades médicas para identificar al instante si una persona con malestares tiene Covid-19 o influenza.
Por su parte, el director general del IMSS, Zoé Robledo, agregó que también habrá una división de áreas en varios de los espacios para atender a cada paciente. El objetivo es no mezclar a las personas infectadas para que cada una permanezca en un espacio exclusivo para casos Covid-19 o en uno para influenza.
Estamos justamente en una planeación para que podamos detectar en la unidad hospitalaria, sin necesidad de que la prueba se vaya a laboratorio, con algunas pruebas rápidas que han mostrado buena eficiencia. Entonces, en el momento en el que un paciente con síntomas llegue a la unidad, ahí mismo se le pueda hacer la prueba y podamos saber si es influenza o es Covid.
Además señaló que ante el panorama que se vislumbra se planea ofrecer mayor apoyo al personal médico. Lo primero y más importante es la normalización del uso de Equipos Personales de Protección (EPP)
Indicó que ahora será más habitual ver a médicos generales y enfermeras que los porten. Ya no sólo es un tema de especialistas o personal de laboratorio sino que más doctores deben mantenerse protegidos dentro de su espacio de trabajo.
