Los resultados del proyecto llevado a cabo por el Instituto de Investigación Sanitaria Incliva, del Hospital Clínico de Valencia, permitieron develar un perfil molecular de nefropatía temprana en hipertensos.
El perfil molecular se encontró en la sangre y orina asociado al desarrollo de enfermedad renal en estadios tempranos en pacientes con hipertensión arterial, que contribuirá a facilitar el diagnóstico precoz, el pronóstico y ajustes de la medicación, mejorando, de este modo, su calidad de vida.
La investigación fue liderada por Raquel Cortés, encargada del Grupo de Estudio de Riesgo Cardiometabólico y Renal del Incliva, coordinado por Josep Redón. Los resultados se publicaron en la revista Hypertension, de la American Heart Association, con el artículo titulado “Urinary- and Plasma-Derived Exosomes Reveal a Distinct MicroRNA Signature Associated With Albuminuria in Hypertension”.
Los resultados citados y tomados de la investigación que mencionamos a continuación arrojaron que la excreción urinaria de albúmina (EAU) es un marcador de riesgo cardiovascular y daño renal en la hipertensión.
¿Cómo se llevó a acabo?
Este estudio tuvo como objetivo establecer un perfil / firma de miARN exosómico asociado a la hipertensión con aumento de EAU y el impacto de TGF-β1 profibrótico (factor de crecimiento transformante β1) en la liberación de miARN de exosomas. Por lo tanto, se aislaron y caracterizaron muestras de exosomas de pacientes con hipertensión con / sin EAU.
Se prepararon tres bibliotecas de ARN pequeñas individuales y únicas de cada sujeto (plasma total, exosomas urinarios y derivados del plasma) para el perfil de secuenciación de próxima generación.
Los miARN expresados diferencialmente estaban sobrerrepresentados en las vías de la Enciclopedia de genes y genomas de Kyoto, y los miARN seleccionados se validaron mediante la reacción en cadena de la polimerasa cuantitativa en tiempo real en una cohorte de confirmación. Por lo tanto, se identificó una firma de 29 miARN circulantes desregulados en sujetos con este padecimiento de los EAU, que regulan 21 vías. Además, los cambios en los niveles de 4 exosomas-miARN se validaron en una cohorte de confirmación y se encontraron asociados con albuminuria.
En particular, se encontró que miR-26a, el principal regulador de la señalización de TGF-β, estaba regulado a la baja en ambos tipos de exosomas en comparación con los controles sanos y con los normoalbuminúricos de hipertensión (P <0,01). De manera similar, se encontraron niveles reducidos de miR-26a en exosomas derivados de podocitos después del estrés de TGF-β. Nuestros resultados revelaron una firma de miARN de exosomas asociada a la albuminuria en la hipertensión.
Además, se encontró que los exosomas miR-26a parecían jugar un papel clave en la regulación de TGF-β, un efecto relevante en el daño de los podocitos. Estos hallazgos apoyan el uso de miARN de exosomas como biomarcadores de la progresión del riesgo cardiovascular y herramientas terapéuticas en el daño renal temprano.
Hipertensión arterial, un problema de salud pública en México
Según cifras de la INSP, anualmente en la región de las Américas ocurren 1.6 millones de muertes por enfermedades cardiovasculares, de las cuales alrededor de medio millón son personas menores de 70 años, lo cual se considera una muerte prematura y evitable.
La hipertensión afecta a entre el 20 y 40% de la población adulta y significa que alrededor de 250 millones de personas padecen de presión alta. De hecho, la Organización Mundial de la Salud (OMS), de acuerdo a sus reportes, refieren que la Hipertensión es el factores de riesgo más importantes hasta el momento.
En el país, uno de cada cuatro mexicanos padece hipertensión arterial, en los hombres la prevalencia es de 24.9% y en mujeres 26.1%. Prevalencia estimada en 30 % conforme al criterio de 140/90 mm Hg, lo que equivale alrededor de 30 millones que corresponden al diagnóstico de hipertensión, pero con los nuevos criterios de la American Heart Association la población con hipertensión será al menos del doble.
De acuerdo con la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición de Medio Camino 2016, realizada por el Instituto Nacional de Salud Pública (INSP) y la Secretaría de Salud, uno de cada cuatro adultos en México padece hipertensión arterial, es decir, 25.5 por ciento de la población, de los cuales aproximadamente el 40 por ciento ignora que tiene esta enfermedad, y ello repercute en su condición de salud; y cerca del 60 por ciento que conoce el diagnóstico, solamente la mitad están controlados.
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