En Mexico, el cáncer colorrectal, ocupó, en el año 2020, el cuarto lugar en incidencia dentro de los cánceres con mayor número de nuevos casos. Se registraron, concretamente, 11 mil 191 nuevos casos y 6 mil 245 defunciones, según datos ofrecidos por GLOBOCAN 2020. En el mismo año, pero a nivel mundial, este tipo de cáncer se ubicó como el cuarto tipo de cáncer con mayor número de nuevos casos y el quinto por su número de fallecimientos.
Respecto al cáncer colorrectal ha expresado la Dra. Lucía E. Flores García, gerente médico de Oncología en MSD que “el compromiso con los pacientes es inquebrantable. Por eso, cada año, se suma a la conmemoración del Día Nacional contra el Cáncer Colorrectal, difundiendo materiales informativos con el objetivo de incrementar el conocimiento sobre este tipo de cáncer”.
El riesgo de desarrollar cáncer colorrectal aumenta con la edad
Del cáncer colorrectal se puede destacar que el riesgo de desarrollarlo aumenta con la edad. Los adultos más jóvenes también pueden manifestarlo, pero es más común después de los 50 años. Además de la edad, existen múltiples factores de riesgo relacionados con el cáncer colorrectal están vinculados con el estilo de vida.
Muchas personas con este tipo de cáncer no experimentan síntomas en las primeras etapas de la enfermedad. Cuando aparecen los síntomas, es probable que varíen, según el tamaño y la ubicación del cáncer en el intestino grueso. Respecto a los signos y síntomas del cáncer colorrectal incluyen:
- Cambio persistente en sus hábitos intestinales, incluyendo diarrea o estreñimiento o un cambio en la consistencia de sus heces.
- Sangrado rectal o sangre en las heces.
- Molestias abdominales persistentes, como calambres, gases o dolor.
- Sensación de que su intestino no se vacía por completo.
- Debilidad o fatiga.
- Pérdida de peso inexplicable.
Para su diagnóstico existen numerosas pruebas y procedimientos
En cuanto al diagnóstico del cáncer colorrectal se pueden utilizar algunas de las siguientes pruebas y procedimientos que a continuación enumeramos:
- Colonoscopia: le permite al médico mirar dentro de todo el recto y el colon mientras el paciente está sedado.
- Biopsia: consiste en la extracción de una pequeña cantidad de tejido para examinarlo bajo un microscopio.
- Análisis de sangre.
- Prueba de biomarcadores del tumor: se realizan pruebas de laboratorio en una muestra de tumor para identificar genes específicos, proteínas y otros factores exclusivos del tumor.
- Imágenes por resonancia magnética (IRM).
- Tomografía computarizada (CT o CAT).
- Ultrasonido.
Las pruebas de detección oportuna, a menudo, pueden detectar el cáncer colorrectal en forma temprana cuando es pequeño, no se ha diseminado y puede ser más fácil de tratar. Las pruebas de detección periódicas pueden incluso prevenir este tipo de cáncer.