Resulta paradójico que en personas que cuidan de la salud de los demás, los profesionales sanitarios, también se presenten problemas de salud. Pero, al fin y al cabo, somos personas y no dejamos de enfermar por dedicarse al sector de la sanidad. En el caso de las pediatras femeninas, los problemas de salud mental son una realidad y vamos a analizarla.
La pandemia provocada por la COVID-19 ha incrementado los problemas
Tan solo en Estados Unidos, más de 20 millones de trabajadores de salud corren el riesgo de presentar problemas de salud mental debido a condiciones de trabajo exigentes. Entre estos problemas, se incluyen desgaste profesional, ansiedad, estrés, depresión, trastornos por consumo de sustancias y conducta suicida.
Estos problemas no son nuevos a raíz de la pandemia provocada por la COVID-19 pero sí es cierto que se han visto incrementados. Antes de esta nueva realidad, las pediatras ya se enfrentaban a condiciones de trabajo exigentes y sufrían altas tasas de malos desenlaces en salud mental.
Causantes de los problemas de salud mental en pediatras
Las exigentes condiciones de trabajo son el principal foco de atracción para los problemas de salud mental y, entre algunas de ellas, destacan las siguientes:
- Turnos rotativos e irregulares.
- Trabajo físico y emocional intenso.
- Largas horas de trabajo.
- Mayor riesgo de exposición a enfermedades y violencia.
- Exposición al sufrimiento humano y la muerte.
Algunas investigaciones muestran que los trabajadores de salud están sintiendo el peso de estos desafíos y que esto se ha intensificado tras la pandemia. La escasez de personal y de equipo de protección personal, así como la fatiga, las muertes y la aflicción han añadido un nuevo nivel de carga a los trabajadores de la salud. Las últimas encuestas sobre salud mental en pediatras han determinado que el 93% de los trabajadores de salud reportaron que tenían estrés y demasiado trabajo que hacer.
Es por ello por lo que se deben plantear desafíos que hagan solventar estos problemas y que, en ningún momento, se produzca una escasez de trabajadores de la salud.