El olfato haciéndolo nuestro sentido más fuerte

Nadie conoce la realidad exterior, lo que hacemos es crear una representación de la misma a través de los sentidos que tenemos.  En este proceso de percepción se encuentra el olfato, muchas veces olvidado y minusvalorado, pero realmente importante, tanto es así, que sin él la vida sería cruel e insufrible.

La percepción del olor se realiza en el cerebro en el caso del olfato, al igual que en el gusto y el tacto, la memoria de los mismos está más relacionada con las emociones que producen estos sentidos que con el recuerdo de lo que percibimos a través de ellos. Esto ocurre porque este sentido activa en mayor medida la región cerebral de la memoria episódica, que la memoria semántica. Recordemos que la memoria episódica es donde almacenamos nuestras experiencias pasadas, nuestra vida personal, mientras que la semántica es la memoria del significado y la más parecida a lo que entendemos como memoria a largo plazo.2

Investigadores han comprobado que existe una ruta neuronal en el hipocampo cerebral que, si se trabaja, podría servir para desarrollar la memoria vinculada con el olfato. Los especímenes analizados, demostraron siempre una preferencia por los nuevos olores que, por los familiares, esto ha sido comparado con la de leer un libro y que deriva en la activación de zonas que archivan datos en nuestra mente.  El olfato juega un papel importante en nuestra memoria.  A menudo la evocación de recuerdos se reduce a las imágenes, pero tal y como se indica en el estudio de la Universidad de Toronto, nuestra mente es capaz de rememorar olores de nuestra infancia.1

Muchas cosas pueden causar la pérdida del olfato. La nariz tapada, o un crecimiento inocuo en la nariz (llamado pólipo) impiden la entrada del aire y, por lo tanto, que los olores lleguen a las células sensoriales. Determinados medicamentos, como los antibióticos o las píldoras para la presión arterial, pueden alterar el olfato. Estos efectos suelen ser temporales y debería volver a la normalidad una vez pasados los tratamientos.  Pero algunas cosas pueden provocar una pérdida del olfato duradera, una lesión en la cabeza o un virus, pueden dañar los nervios relacionados con el olfato.  Además, su capacidad olfativa puede disminuir naturalmente a medida que se envejece y pueden ser un signo precoz de enfermedades graves como Parkinson, Alzheimer o la esclerosis múltiple. El grupo de Devanand, actualmente estudia las relaciones entre las disfunciones olfativas y el Alzheimer 3.

Desde un ámbito científico hay poca evidencia que apoye la efectividad de la aromaterapia para solucionar problemas de salud.  Una terapia recomendada para ejercitar el sentido del olfato es que cuando se encuentren en un sitio nuevo, buscar los olores presentes e identificarlos, estos sitios suelen ser lugar de trabajo, casa, cafeterías, cines, tiendas y en cada sitio que vayas: una frutería, cuando vayas al mercado, en una pastelería, aprovecha cualquier circunstancia para ejercitar el olfato y su memoria.  Con el tiempo descubrirá que ejercitando este sentido tendrás una mayor agudeza y sensibilidad para percibir el entorno que te rodea. Intelectualmente, tendrás un cerebro en forma y ejercitado.

REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS

  1. Montero, D. (2020, octubre 8). La importancia del olfato en la generación de recuerdos en la infancia. Recuperado el 8 de mayo de 2021, de HACER FAMILIA website: https://www.hacerfamilia.com/ninos/importancia-olfato-generacion-recuerdos-infancia-20190428160107.html. (c) 2021 Europa Press. Está expresamente prohibida la redistribución y la redifusión de este contenido sin su previo y expreso consentimiento.
  2. Vinetur. (2021). Ejercicios para entrenar el olfato. Vinetur La revista digital del Vino. Recuperado de https://www.vinetur.com/2015022318275/ejercicios-para-entrenar-el-olfato.html
  3. De la Salud (NIH) IN. Lo que su nariz sabe. National Institutes of Health [Internet]. julio de 2016; Disponible en: https://salud.nih.gov/articulo/lo-que-su-nariz-sabe/
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