Conforme transcurren los días aumenta la controversia en torno a la vacuna contra la Covid-19 de AstraZeneca. Aunque durante la fas inicial de desarrollo fue considerada como la mejor del mundo gracias a su doble protección ahora todo es distinto. A la fecha se mantiene como a segunda que más ha sido aplicada con más de 17 millones de dosis en el planeta pero pronto eso podría cambiar porque cada vez son más las naciones que la suspenden. Todo tiene su origen en presuntos efectos adversos graves que provoca. Mientras eso se aclara las autoridades sanitarias han instaurado de inmediato un nuevo plan de inmunización.
¿Qué generó el problema?
En ese sentido, uno de los primeros países en tomar una decisión fulminante fue Dinamarca. Ante casos de trombosis en personas que recién habían sido inoculadas se optó por suspender la aplicación del biológico durante 14 días.
Durante este período se espera que la farmacéutica compruebe que su insumo es seguro y no ha sido el responsable de las acusaciones en su contra.
Aunque el problema es que la misma situación se ha observado en otros territorios. En Noruega se reporta que tres médicos que recibieron la vacuna desarrollaron extraños síntomas como sangrado, coágulos de sangre y un recuento bajo de plaquetas.
Por su parte, hasta el 8 de marzo se habían notificado 15 casos de de Trombosis venosa profunda y 22 de embolia pulmonar en personas en Europa que recién habían sido inoculadas. Todavía no se puede demostrar que la inyección haya sido la responsable directa pero las sospechas existen.
A partir de lo anterior ha crecido la desconfianza hacia la inmunización de AstraZeneca. Como resultado, hasta este momento ya son 17 los países que han suspendido su aplicación aunque la lista podría aumentar. Inicialmente el problema fue en Europa pero ahora inclusive Tailandia se unió a esta medida de restricción que tendrá una duración mínima de dos semanas aunque podría extenderse.
- Alemania.
- Austria.
- Bulgaria.
- Dinamarca.
- Estonia.
- Francia.
- Holanda.
- Italia.
- Irlanda.
- Islandia.
- Letonia.
- Lituania.
- Luxemburgo.
- Noruega.
- Países Bajos.
- Rumania.
- Tailandia.
La respuesta de AstraZeneca
Por su parte, la respuesta inmediata de AstraZeneca es que no existe evidencia científica de que su vacuna aumente la probabilidad de trombosis o cualquier otro efecto adversos grave. De cualquier forma, la compañía agregó que la seguridad es la preocupación primordial y respetan la decisión de las autoridades de cada nación. Al mismo tiempo que van a continuar los trabajos para demostrar que su insumo es completamente seguro.
Ahora bien, en el caso de México la Secretaría de Salud (SSa) mantiene su postura acerca de que no habrá cambios en la estrategia nacional. Con esto en mente, la aplicación de la vacuna de AstraZeneca continuará de manera ordinaria. De igual forma la producción de más de 77 millones de dosis para ser distribuidas en toda América Latina se mantiene conforme al plan inicial.
